CÓRDOBA 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los internos del Centro Penitenciario de Córdoba que hoy protagonizaron un intento de motín agredieron con palos, barras metálicas y 'pinchos carcelarios' a los funcionarios de prisiones que intervinieron para sofocar la acción violenta de los presos en los módulos 12 y 14 de la prisión cordobesa, ubicada junto a la barriada periférica de Alcolea.
Según informó hoy en un comunicado la Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias (Acaip), sindicato mayoritario en la cárcel cordobesa, los hechos tuvieron lugar sobre las 9.00 horas de hoy y el balance fue que resultaron "gravemente agredidos" varios funcionarios, "uno de ellos herido con un pincho carcelario".
El suceso, según Acaip, se inició en el módulo 12, "en el que se encuentran internos clasificados en segundo grado, con trayectorias penitenciaria y delictiva que requieren un mayor control". Sobre las 9.00 horas, "los funcionarios de servicio en dicho módulo se percatan del alto grado de excitación de un interno y proceden inmediatamente a separarlo del resto de presos, para evitar que ocurra algo mas grave".
Seguidamente, "otro interno de los que lideran el modulo comenzó a proferir insultos y amenazas contra los funcionarios y contra los internos, hasta conseguir que éstos se amotinaran", lo que determinó a los funcionarios a intervenir para aislar a los amotinados, siendo fuertemente golpeados con palos, barras metálicas y agredidos con pinchos carcelarios, al tiempo que les amenazaban" de muerte.
De forma paralela, el hermano de uno de los presos amotinados, que en este caso se encuentra internado en el módulo situado enfrente, el número 14, donde están los reclusos de segundo grado pero que, por "su trayectoria penitenciaria o delictiva, requieren un mayor control, consiguió un conato de amotinamiento" en el mencionado módulo 14, "por lo que los funcionarios tuvieron que dividirse, percatándose de que en los módulos contiguos, 11 y 13, se notaba un fuerte nerviosismo y mucha tensión, que consiguieron reducir gracias a su rápida intervención".
A consecuencia de todos estos sucesos, "un funcionario resultó herido con arma blanca en el hombro y varios funcionarios con múltiples contusiones y hematomas en distintas partes del cuerpo, teniendo que ser atendidos por los servicio sanitarios del Centro Penitenciario", aunque, según el relato de Acaip, "afortunadamente y gracias a la rápida intervención de todos los funcionarios, se consiguió restaurar el orden, acabando en aislamiento solamente seis reclusos", mientras que "el mobiliario de ambos módulos quedó gravemente dañado, especialmente los cristales, mesas y sillas" de los mismos.
Acaip criticó la falta de medios adecuados y suficientes para que los funcionarios hagan frente a situaciones de este tipo, a lo que se suma la "elevada masificación" que sufre la prisión cordobesa, "con una población reclusa de mas de 1.800 internos, pese a que la dotación de celdas funcionales existentes solamente está diseñada para albergar a 1.008". Ello supone "un gravísimo problema" a la hora de contar con "unas mínimas garantías de seguridad", tanto para los funcionarios de prisiones, cuya plantilla se considera insuficiente por Acaip, como para los reclusos no violentos.