Conscientes de que no es el mejor momento del sector piden ayuda y búsqueda de soluciones a las administraciones y los comerciantes
TOLEDO, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
CCOO y UGT han convocado una huelga para el próximo martes, 19 de febrero, ante el Juzgado Arbitral de Toledo con el objetivo de protestar por el cierre de la espadería Bermejo que dejará en el paro a sus 38 trabajadores.
Así lo avanzó el secretario provincial del metal de CCOO, Javier García Barroso, quien indicó que no se trata de una huelga en toda regla "porque los trabajadores ya están en la calle", pero advirtió de que al menos "nos manifestaremos ante la prensa porque no vamos a permitir que los responsables de esta situación se vayan de rositas".
En la sede regional de CCOO, García Barroso hizo estas declaraciones acompañado por el secretario regional del Metal, Construcción y Afines de UGT, Carlos Duque, y los 38 trabajadores de la espadería Bermejo --con una solera de 100 años-- "que se encuentran en una situación traumática porque han trabajado toda su vida en el sector". "Si les despiden ahora, será muy difícil reubicarles, porque no hay fábricas que puedan reabsorber a 38 trabajadores", alegó.
Explicó que el pasado 5 de febrero, los directivos de la empresa presentaron en los Juzgados de Toledo un proceso concursal de forma voluntaria y por insolvencia inminente, del que "se nos informó verbalmente y de una forma hostil e ingrata, diciendo que los documentos que nos tenían que presentar estaban en los juzgados", por lo que ahora "sólo nos queda esperar y ver qué decisión toma el juez".
Por otra parte, señaló que plantearon a los trabajadores "en una nota de prensa para salvaguardar sus vergüenzas", que se quedaran con la empresa, y eso "desde nuestra opinión es una cortina de humo para desviar la realidad de su actuación".
Además, indicó que "sabemos que actualmente están pasando a otras empresas los pedidos que tendrían que realizar estos trabajadores", por lo que se preguntó si también entregaría a los trabajadores la marca. "Sabemos que la respuesta sería no, por lo que les preguntamos a ellos a dónde va a ir a parar la marca de Bermejo", apostilló.
Para García Barroso, los empresarios son los únicos responsables de la situación actual "porque no se han comprometido con su propia empresa, su prestigio, ni con el capital humano tan importante que poseen, y que ha sido el que ha sacado el negocio a flote con su esfuerzo".
Se refirió a que los trabajadores "han sufrido un maltrato", en el sentido de que no se ha invertido lo suficiente en tecnología. "Nos hemos encontrado maquinaria sin el marcado europeo obligatorio 'CE'. Estos trabajadores han levantado la empresa con su capital humano y la ayuda de una maquinaria paupérrima".
También recordó cómo las distintas administraciones locales y regionales han estado siempre a favor de la espadería, "mostrando mucho interés por este sector, de gran tradición en la zona".
Finalmente, el secretario provincial del metal de CCOO consideró que no hay razones suficientes para la presentación de dicho proceso concursal "que han gestionado de forma oculta", y subrayó que protestarán "por conseguir otra solución más viable".
APOYO AL SECTOR.
Por su parte, el secretario regional del Metal, Construcción y Afines de UGT, Carlos Duque, incidió en "los malos modales de los empresarios al tratar el cierre de Bermejo", ya que "lo que deberían haber hecho desde el principio es trasladar a los sindicatos el problema, porque habríamos hecho todo lo posible para impedir el cierre, si es que ese es el problema real".
Respecto a la posibilidad de que los trabajadores se queden con la gestión de la fábrica, Duque subrayó que "primero hay que estudiar todas las posibilidades, las deudas o la cartera de clientes entre otros factores de gran importancia".
En otro orden de cosas, manifestó que son conscientes de que el sector de la espadería "no está en su mejor momento", por eso hizo un llamamiento a la Consejería de Turismo y Artesanía, porque, advirtió, "si no se toma ninguna medida, tarde o temprano se dejará sentir igualmente en el sector del damasquinado, que está siendo invadido por el mercado chino".
Del mismo modo, hizo un llamamiento a los empresarios de la zona "para que vendan nuestros productos, de sobrada calidad, y no hagan competencia desleal", e incidió en la necesidad de encontrar soluciones, ya que, "si empezamos a cerrar fábricas en Toledo, nos espera un futuro incierto".
Por último, insistió en la necesidad de que administraciones locales y regionales, y sindicatos "impulsen la espadería de Toledo y la artesanía de Castilla-La Mancha en general", concluyó.