SANTIAGO DE COMPOSTELA 12 Nov. (EUROPA PRESS) -
Grupos ecologistas coincidieron hoy en reclamar a la Administración autonómica que negocie el rescate de concesiones hidroeléctricas en el río Xallas para aliviar la "sobreexplotación" de este cauce fluvial, que en sus últimos nueve kilómetros soporta cuatro grandes embalses y ocho aprovechamientos hidroeléctricos, todos explotados por Ferroatlántica.
Después de que el pasado fin de semana el embalse de Fervenza se secase, lo que provocó la muerte de más de 1.500 truchas y escalos, los grupos ecologistas alertaron de que este es "un desastre anunciado" a la vista de la política hidráulica que se sigue en Galicia y repartieron las responsabilidades "a partes iguales" entre Ferroatlántica, empresa del Grupo Villar Mir concesionaria de esta presa, y la Administración autonómica.
En declaraciones a Europa Press, el secretario ejecutivo de la Asociación de Defensa Ecolóxica de Galicia (Adega), Fins Eirexas, sumó al factor ambiental debido a la sequía que vive Galicia en los últimos dos meses, "la dictadura del kilovatio" como causa de este desastre ecológico. Así, criticó que la Xunta autorizase hace cuatro meses "tres nuevos aprovechamientos hidroeléctricos" en el río Xallas que serán explotados por Ferroatlántica.
Ante esta situación de "explotación abusiva" del río Xallas, Adega reclamó el cese del presidente de Augas de Galicia, José Antonio Santiso Blanco, y apostó por que la Administración negocie con las empresas o directamente "expropie" las concesiones hidroeléctricas y que se proceda a "derrumbar embalses" para "devolverle al Xallas su esplendor pasado y aprovechar sus potencialidades naturales y turísticas".
En opinión de Adega, el río Xallas sufre una presión energética que sobrepasa su capacidad hidráulica, a lo que hay que añadir que Ferroatlántica desarrolla prácticas empresariales "nada respetuosas con el medio ambiente". Al respecto, denuncia que tiene "secuestrada" la cascada de Ézaro y alerta del "peligro" medioambiental que supone "dejar en manos privadas la gestión del tramo final del río", que padece "bruscos" cambios del caudal.
AMENAZA.
Por su parte, el coordinador general de la Federación Ecoloxista Galega (FEG), Tino Quintela, alertó de que la zona de la Devesa de Anllares, en el cauce del Xallas, es una de las zonas más "amenazadas" por los aprovechamientos hidroeléctricos, por lo que también estuvo de acuerdo en la necesidad de rescatar concesiones para paliar la presión sobre el cauce.
Al respecto, criticó que sean empresas privadas las que "acaban actuando como reguladoras" de los cauces fluviales y reclamó que se aplique la directiva marco europea de aguas, que en Galicia "lleva varios años de retraso" y que marca las líneas para la regeneración de los ríos. A su juicio, "es preciso empezar a cumplir y hacer cumplir la legislación vigente".