Birmania.- España advierte de las "graves consecuencias" de una "represión violenta" a las manifestaciones en Birmania

Actualizado: miércoles, 26 septiembre 2007 14:49

MADRID 26 Sep. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno expresó hoy su "viva preocupación" por la situación que atraviesa Birmania, donde las fuerzas de seguridad recurrieron hoy a la fuerza para dispersar las manifestaciones pacíficas contra la Junta Militar en el poder, y advirtió de que "la represión violenta" podría conllevar "graves consecuencias".

"El Gobierno de España manifiesta su viva preocupación por la actual situación en Birmania, que está siguiendo muy de cerca" y se suma a las peticiones realizadas a las autoridades birmanas para que den muestras de la "máxima contención, ya que la represión violenta de las protestas que se están desarrollando en los últimos días podría tener muy graves consecuencias", según el comunicado enviado por la Dirección General de Comunicación Exterior (DGCE).

Asimismo, el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero transmite "su solidaridad al pueblo birmano y su apoyo a todos los esfuerzos de los actores internacionales y regionales comprometidos con la búsqueda de una solución política". Dicha solución, según el Gobierno, "sólo se puede encontrar mediante el diálogo y nunca con el recurso a la fuerza".

En este sentido, el Gobierno reiteró su "deseo de que se ponga en libertad a todos los presos políticos, y de que se avance en la construcción de un marco político que permita la consolidación de la democracia y el respeto a los Derechos Humanos", en Birmania.

En los últimos días las calles de Rangún y de otra importantes ciudades del país han sido escenario de manifestaciones pacíficas encabezadas por los monjes budistas y a los que se han sumado los activistas pro democracia y ciudadanos de a pie.

Anoche, la Junta Militar impuso el toque de queda y prohibió las reuniones de más de cinco personas, pese a lo cual, hoy volvieron a registrarse manifestaciones, dispersadas por las fuerzas del orden mediante el uso de porras, disparos al aire y gases lacrimógenos.