Junta premia con Medalla Menga a la Mesa ciudadana de los dólmenes del Aljarafe por labor protectora

VALENCINA DE LA CONCEPCIÓN (SEVILLA), 25 (EUROPA PRESS)

La 'mesa ciudadana en defensa del paisaje protegido y el yacimiento de Valencina-Guzmán', creada por las organizaciones conservacionistas de la zona norte de la comarca sevillana del Aljarafe en torno a los dólmenes y yacimientos arqueológicos que pueblan esta zona, ha visto reconocida su labor con la entrega de la Medalla Menga en el reciente I Congreso de Prehistoria de Andalucía, celebrado en Antequera (Málaga).

En representación de la plataforma, según un comunicado de la organización, recogió el galardón Eduardo Apellániz de manos del consejero de Cultura, Paulino Plata. Mediante la Medalla Menga, el Comité Científico del Memorial Luis Siret "reconoce la labor incansable, altruista y plena de rigor de los ciudadanos en defensa del yacimiento prehistórico" de los municipios de Valencina de la Concepción y Castilleja de Guzmán, donde se alzan los dólmenes de La Pastora, Matarrubilla, Ontiveros y Montelirio.

La Mesa se muestra "satisfecha" con la sensibilidad de los responsables de la Consejería de Cultura y espera que este premio a su labor "no sea sólo un respaldo a un modelo territorial basado en la unidad del yacimiento y el respeto al conjunto de sus valores; sino que también se convierta en una apuesta por la ampliación y la redefinición del espacio público, adaptando los procesos de toma de decisiones de aquello que afecta a los ciudadanos, a las nuevas posibilidades de gobernanza que ofrece la sociedad del conocimiento: más ciudadanía significa más transparencia, comunicación, diálogo de saberes y que la participación de los ciudadanos pase del discurso institucional a las prácticas políticas de gestión".

"Tras años de reivindicaciones, en los que se han dado hitos como detener la carretera de los dólmenes o paralizar la construcción de un geriátrico y un centro comercial junto al dolmen de Montelirio, la Mesa invita a las administraciones locales a sumarse a estos principios, y abandonar modelos urbanísticos y megaproyectos de edificaciones difíciles de asumir y de gestionar, que pertenecen al pasado y que ponen en peligro el delicado equilibrio del territorio".

Es tiempo, según la organización, de "sentarse de forma seria, con receptividad y creatividad, a definir conjuntamente con ciudadanos y expertos un proyecto global para el territorio que asuma sus valores y que rentabilice de forma sostenible su gran riqueza patrimonial, paisajística y social".