MURCIA 26 Dic. (EUROPA PRESS) -
Banco Mare Nostrum (BMN) ha afirmado que afronta en una posición "de privilegio" la segunda oleada de reestructuración bancaria anunciada por el nuevo presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y ha asegurado que queda "totalmente descartada" la posibilidad de ser absorbidos por otras entidades.
En declaraciones a Europa Press, BMN ha destacado que ha hecho "un saneamiento de todo el balance, y se mantiene la previsión de llegar a final de año con una disminución de "cerca del 23 por ciento de todo el riesgo inmobiliario del grupo, es decir, prácticamente una cuarta parte fuera, en un año".
Según las previsiones de BMN, esto "dará mucha fortaleza al grupo", a lo que hay que sumar que el Banco "sigue con todo el proceso de reestructuración de las cuatro entidades englobadas, y el proceso de recapitalización se culminó con muchísimo éxito a mediados de octubre, consiguiendo una ratio de capital principal del 9,2".
A su juicio, el nuevo proceso de reestructuración "dependería de la foto tomada en el momento en que se inicien las negociaciones" de forma que, cuando más valor tenga la entidad, parte con una posición más privilegiada. En cualquier caso, afirma que BMN "sale guapa en la foto ahora".
Aunque es "un poco pronto" para hacer una análisis, BMN considera "positivo" un segundo proceso de reestructuración, que estima como una fase de "consolidación". En cualquier caso, ha destacado que el panorama está "muy abierto".
En este momento, BMN dice estar centrado en dar valor al grupo bancario, saneando y reestructurando la entidad, de forma que la fusión "avanza y se están superando todos los calendarios", yendo incluso "un poco más rápido de lo previsto".
El objetivo es "partir desde una posición privilegiada si hubiera este segundo proceso de consolidación", pero el Banco insiste en que "todavía no hay nada, es muy pronto y está todo muy abierto", de manera que se empezará a vislumbrar el futuro "de cara al año que viene".
Cabe recordar que, en su discurso de investidura en el Congreso de los Diputados, Rajoy insistió en la necesidad de completar la reestructuración del sistema financiero despejando las dudas sobre las valoraciones de determinados activos, especialmente inmobiliarios.
"Estas medidas supondrán la asunción de pérdidas latentes u ocultas en los balances, por lo que es inevitable una segunda ola de reestructuraciones, con más fusiones y más necesidades de capital", aseguró Rajoy.