Aunque aseguran que el sector industrial se ha posicionado a la vanguardia de la actividad productiva, Cesur augura que no se alcanzarán los objetivos previstos por la Junta para 2020
SEVILLA, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Asociación de Empresarios del Sur de España (Cesur) ha afirmado este lunes que "Andalucía ha entrado en una fase de reindustrialización de su actividad económica" fruto de que el crecimiento de este sector desde la recuperación "ha sido superior al del resto de la economía, con tasas que han superado habitualmente el 4 por ciento".
Así lo ponen de manifiesto los datos presentados por el presidente de Cesur, el también responsable del Grupo Insur, Ricardo Pumar, y por el presidente de la recién creada Comisión de Industria de Cesur, Eugenio Barroso, que han destacado que "mientras en 2013 el peso de este sector en el conjunto de la economía era de un 10,7 por ciento, hoy en día supera el 12 por ciento según los datos".
Los empresarios del Sur, que han presentado la memoria del 'Mercado de Trabajo en Andalucía 2008-2018. De la crisis a la recuperación. Un análisis del sector industrial y de los efectos del cambio tecnológico' elaborado por su servicio de estudios, han explicado que "entre 2008 y 2014 el Valor Agregado Bruto (VAB) industrial cayó un 18,8 por ciento, casi nueve puntos porcentuales más que el resto de la economía andaluza".
Sin embargo, han añadido, "esta caída fue claramente compensada entre 2014 y 2018, con aumentos del 18,3 por ciento superiores a los experimentados por el conjunto de la economía andaluza que se quedó en un crecimiento cercano al 12 por ciento".
Pese al importante papel que está alcanzando la industria andaluza, el profesor Manuel Hidalgo, uno de los autores del estudio, destaca que "el actual crecimiento no permitirá que el peso de la industria en la economía andaluza alcance el 20 por ciento del PIB en 2020 como pretende la Junta de Andalucía". "Si crecemos como hasta la fecha", ha matizado, "podremos alcanzar el 14 por ciento, algo ya de por sí positivo al haber pasado del 10 al 12 por ciento en estos últimos años".
En este contexto y según la memoria, las cifras de empleo muestran la misma tendencia. Mientras en 2008 y 2013 el empleo industrial andaluz, medido como puestos de trabajo de la Contabilidad Trimestral Regional, caía un total de 32,7 por ciento frente a un 20,1 por ciento para el conjunto de la economía andaluza, entre 2014 y 2018 el crecimiento de empleo ha sido más intenso en el sector industrial con aumentos acumulados del 19,4 por ciento frente al del 13,1 por ciento del resto de sectores.
Según estos mismos datos, el valor añadido industrial en la comunidad andaluza es hoy tan sólo un 4 por ciento inferior al de antes de 2008, manteniendo un crecimiento sostenido al menos hasta primeros de año. El estudio elaborado por Cesur muestra como la recuperación de Europa, en particular entre 2015 y 2016, consolidaron el impulso de la industria andaluza, con crecimientos en el VAB de entre el 5 y 9 por ciento durante la primera mitad de 2017.
Sin embargo, y a pesar de la relativa pérdida de dinámica observada a partir del verano de 2017, este sector ha mantenido un crecimiento constante al menos hasta inicios de año. No obstante, han especificado, "para los próximos meses estimamos un crecimiento interanual del VAB industrial del 1,5 por ciento, claramente inferior al registrado en los primeros meses del año, cercano al 5 por ciento, debido a la moderación de las exportaciones".
VALOR AÑADIDO
Los responsables empresariales han incidido en el cambio positivo de la industria desde 2014, ya que la media del sector ha crecido durante este periodo un 9,2 por ciento aunque con un comportamiento muy heterogéneo. Además, han destacado que "el cambio producido en la industria andaluza parece ser estructural y en favor de ramas de alto valor añadido y empleo de calidad".
La rama que ha experimentado hasta la fecha una mejor y más intensa recuperación ha sido la fabricación de productos informáticos y vehículos de motor, con aumentos acumulados del 124 por ciento y 60 por ciento respectivamente, asociado este último dato a nuevas cadenas de montaje y actividades vinculadas a la aeronáutica.
Estas ramas han crecido en detrimento de las tradicionales dedicadas a la producción de bienes y materiales para la construcción como la transformación de la madera.
A estas actividades le siguen otras como las extractivas con la puesta en marcha de nuevas minas especialmente de cobre. Resaltan así la explotación de Cobre las Cruces-Inmet Mining en Sevilla y Matsa-Trafigura en Huelva. A ellas hay que sumar el importante incremento en la producción de refino que ha supuesto la apuesta de Cepsa por sus dos factorías en Andalucía.
Así, las ramas que engloban más de la mitad del volumen de negocio industrial, el 64,1 por ciento de la industria, son la extractiva y derivadas del petróleo y la agroalimentaria aumentando el peso de la primera considerablemente en los últimos años. Detrás de ellos hay sectores que han crecido como el químico y farmacéutico.
"Estos datos, unidos a la estructura de las exportaciones andaluzas, refleja un relativo cambio estructural en la industria andaluza", por lo que podemos decir ha añadido Hidalgo, que "la industria andaluza se ha posicionado a la vanguardia de la recuperación de la actividad productiva y del empleo en Andalucía".
El informe del 'Mercado de Trabajo en Andalucía 2008-2018. De la crisis a la recuperación. Un análisis del sector industrial y de los efectos del cambio tecnológico', ha sido elaborado por el Servicio de Estudios de la Asociación de Empresarios del Sur de España compuesto, en esta ocasión, por los profesores J. Ignacio García Pérez, Manuel Hidalgo Pérez y David Troncoso Ponce.