JAÉN 28 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha detenido a tres varones, L.C.P.M., de 40 años, R.P.M., de 38 años, y J.P.M., de 35 años, vecinos de Bailén los dos primeros y de Loja (Granada) el tercero, como presuntos autores de un delito contra la fauna al estar acusados de haber practicado caza furtiva en el interior de la finca Cabeza Parda del término municipal jiennense de Andújar, constituida como Coto Privado de Caza.
En un comunicado de prensa, la Benemérita ha señalado que detectó la presencia de cazadores furtivos con ropa de camuflaje y grandes mochilas, provistos de un rifle, en el interior de dicha finca, cuyo aprovechamiento principal es la caza mayor, un hecho del que fue alertado el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Comandancia.
De esta forma, establecido el correspondiente dispositivo de vigilancia y cerco de la zona, por las patrullas del Seprona de Jaén, Andújar y Linares, con apoyo de una Patrulla de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil y de la Guardería Privada y personal laboral de la finca y de las colindantes, tras permanecer varias horas en el lugar, pudieron ser localizados y detenidos los presuntos furtivos cuando regresaban a la localidad de Baños de Baños de la Encina (Jaén).
Según ha especificificado el Instituto Armado, el dispositivo se mantuvo durante horas en el lugar ante la seguridad de que, al menos, dos de los furtivos habían sido visto perfectamente en la finca en actitud de caza, si bien debido a la abundancia de matorral y monte alto había dificultad de localización de personas que, además, eran perfectas conocedoras del terreno, como se ha podido comprobar.
En el momento de la detención, dos de los cazadores vestían ropa de camuflaje y llevaban consigo radios receptores-comunicadores, dos linternas, un total de 54 kilogramos de carnes deshuesada de cérvido, distribuida en cada una de las mochilas de gran capacidad tipo militar que llevaban consigo, además de ropa de abrigo, comida y otros efectos.
De los hechos se han instruido las correspondientes diligencias que, junto a los detenidos y los efectos intervenidos, han sido puestos a disposición judicial, y se ha formulado denuncia que ha sido remitida a la Delegación provincial de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía. Por último, la Guardia Civil ha indicado que la carne, tras análisis sanitario, ha sido destruida por no ser apta para el consumo humano.