GRANADA 27 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía y las acusaciones particulares han acordado la pena de 18 meses de cárcel para el ganadero de Castril (Granada) acusado de colocar cebos envenenados en el paraje en el que fue hallada muerta una hembra de quebrantahuesos liberada en 2007 en el marco del Programa Andaluz de Reintroducción de la Consejería de Medio Ambiente, informaron a Europa Press fuentes del caso.
Además, las partes han acordado que el procesado, al que se le imputa un delito contra la flora y la fauna, sea inhabilitado para el ejercicio de la caza o la pesca, y tenga el beneficio de no ir a la cárcel con el apercibimiento de que no delinca por un periodo de dos años. Así, en caso de que fuera relacionado con cualquier otro delito o actuación delictiva, tendrá que ingresar en prisión.
En virtud del acuerdo alcanzado, el juicio que estaba previsto celebrarse hoy en el Juzgado de lo Penal 4 de Granada no ha llegado a iniciarse. La Fiscalía pedía inicialmente para el inculpado 3.600 euros de multa y tres años de inhabilitación especial para cazar o pescar por un delito relativo a la protección de la flora, la fauna y los animales domésticos, por el que la acusación particular, ejercida por la Fundación Gypaetus, elevaba su solicitud de multa a 60.000 euros y tres años de prisión.
El Ayuntamiento de Castril, también acusación particular, ha sido el primer Consistorio europeo en personarse en un proceso penal por supuesto uso ilegal de venenos, que es además el primero relacionado con la muerte de un quebrantahuesos liberado en Andalucía, según informó informó la Fundación Gypaetus.
El acusado, identificado como J.G.G., de 68 años y titular de una explotación ganadera fue puesto a disposición judicial el 1 de mayo de 2008 por la patrulla de Huéscar del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil, tras ser sorprendido colocando varios trozos de carne con indicios de contener una sustancia tóxica en el paraje de Hoyos de Moreno (Parque Natural Sierra de Castril), apenas cinco días después de la localización, en el mismo lugar, del cadáver del quebrantahuesos llamado 'Segura'.
'Segura' era una joven hembra nacida el 8 de febrero de 2007 en el Centro de Cría de Quebrantahuesos de Cazorla (Jaén) y que había sido liberada en la Sierra de Segura (Jaén) en mayo de 2007 en el marco del Programa Andaluz de Reintroducción del Quebrantahuesos de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, que actualmente ejecuta la Gypaetus. Desde su liberación 'Segura' se había adaptado perfectamente al medio y mostraba una total capacidad para la búsqueda independiente de alimento y refugio. Su cadáver fue localizado el 25 de abril de 2008 gracias al emisor satélite GPS que portan todos los ejemplares liberados en Andalucía.