SEVILLA 16 Mar. (EUROPA PRESS) -
El consumo moderado del café tiene efectos positivos para la salud gracias a su capacidad antioxidante y su efecto beneficioso en el aparato digestivo, según las conclusiones recogidas en la monografía 'Café y estilo de vida saludable' que se ha presentado este miércoles en el Colegio de Médicos de Sevilla.
Según ha informado el 'Centro de Información Café y Salud', una entidad que se define de carácter científico y que ha promovido la citada monografía, junto al carácter estimulante de la cafeína, principal componente del café, "que mejora el estado de alerta y la concentración", se encuentra también el "carácter preventivo del consumo de café frente a las enfermedades neurodegenerativas, como el Parkinson y el Alzheimer, y algunos tipos de cáncer".
De hecho, el 'Centro de Información Café y Salud' sostiene que existe una "asociación inversa" con la incidencia de diabetes mellitus y las dolencias hepáticas "o sus efectos beneficiosos en la salud cardiovascular".
Han apuntado que, en la actualidad, existen "evidencias científicas suficientes" como para determinar que el consumo moderado y regular de café, "además de formar parte de una dieta equilibrada, tiene efectos beneficiosos en el organismo".
Esta revisión bibliográfica, presentada por dos de sus autores, el especialista en Medicina Interna, Familiar y Comunitaria Mariano de la Figuera y la experta en Medicina de la Educación Física y el Deporte y María Antonia Lizarraga, concluye que "no hay motivos para eliminar el consumo de café como parte de una dieta equilibrada siempre y cuando éste sea moderado, es decir, equivalente a 3 ó 4 tazas diarias".
Además de cafeína, el café contiene otras muchas sustancias como vitaminas, minerales y antioxidantes, por lo que, en función de la cantidad y regularidad de las ingestas, "podría ser considerado un alimento funcional".
Han agregado que estudios científicos recientes se han centrado en la investigación de la capacidad antioxidante del café y los efectos beneficiosos que sus polifenoles pueden tener en el organismo, ya que en la mayoría de países industrializados, entre ellos España, el café "es la mayor o una de las mayores fuentes de antioxidantes en la dieta diaria".
Las evidencias científicas disponibles sostienen que la capacidad antioxidante del café puede ser un factor protector frente a un gran número de enfermedades en las que está implicado el estrés oxidativo de las células, como las de tipo cardiovascular y las de carácter neurodegenerativo.
La mayoría de los estudios epidemiológicos realizados hasta el momento han encontrado una menor incidencia de enfermedades neurodegenerativas como el Parkinson y el Alzheimer entre los bebedores habituales de café. "Los efectos beneficiosos del café en la prevención de la neurodegeneración parecen claros", ha señalado al respecto el catedrático de Bioquímica y Biología Molecular y coautor del libro Rafael Franco.
Por su parte, otra de las autoras del libro, la especialista en Endocrinología y Nutrición Pilar Riobó, ha defendido que el consumo de café a largo plazo "también puede reducir el riesgo de desarrollar diabetes mellitus y mejorar el control metabólico de la glucosa, incluso en pacientes diabéticos".
De igual forma, han resaltado que el café también ha demostrado tener efectos beneficiosos sobre el aparato digestivo, especialmente en la incidencia de algunas de las enfermedades más frecuentes del hígado y de la vesícula biliar. Diversos estudios ponen de manifiesto el carácter protector del café frente a las enfermedades hepáticas, como la cirrosis o el hepatocarcinoma, o la litiasis biliar.
En base a las investigaciones científicas realizadas sobre café y cáncer, los autores del libro han concluido que beber café no aumenta el riesgo general de desarrollar la enfermedad y que, en cambio, puede ser un factor protector frente a algunos tipos de cáncer, como el de faringe, esófago, hígado o colon.