SEVILLA 2 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Asociación de Agentes de Medio Ambiente de Andalucía ha señalado que el decreto que establece el nuevo régimen general de planificación de usos y actividades en los 24 parques naturales de la comunidad, aprobado este martes por el Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía, "hace prevalecer el ladrillo sobre la conservación".
Así, el presidente de este colectivo, Antonio González, ha manifestado a Europa Press que comparte "la preocupación" mostrada por parte de organizaciones ecologistas con respecto a esta norma, pues ésta presenta un "problema fundamental", en concreto, "la prevalencia de los Planes de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) y los Planes Rectores de Uso y Gestión de los parques naturales (PRUG)".
En este sentido, ha explicado que la aprobación de este decreto conlleva "un giro de 180 grados en la política de conservación de la Consejería de Medio Ambiente", la cual, según afirma, "hasta el momento era bastante acertada"". Así, ha resaltado que este "giro provoca que cambiar lo verde por el ladrillo".
Por otro lado, González ha manifestado que esta nueva norma "abre la puerta a la especulación urbanística" y no entiende que los planes de ordenación urbanística "tengan que prevalecer sobre la normativa de protección ambiental".
Del mismo modo, resalta que el decreto aprobado este martes por la Junta de Andalucía abre la puerta a determinadas actuaciones que hasta el momento y actuando en relación a la Ley de Gestión Integrada de la Calidad Ambiental (GICA), como es el caso la apertura de nuevos caminos rurales, necesitaban como "mínimo" un evaluación ambiental, mientras con la entrada en vigor del nuevo régimen de planificación "sólo se necesita una simple notificación a la Consejería".
Asimismo, González ha expresado a Europa Press que esta aprobación es "un nuevo ejemplo" de la manera de legislar de la Junta, "sin escuchar la opinión de las personas implicadas". En este sentido, ha precisado que la aplicación práctica de esta norma se efectúa a través del trabajo de los Agentes de Medio Ambiente, con los que "en ningún momento se ha contado para la redacción de la norma", ha lamentado. "La aprobación de la norma obedece a motivaciones políticas más que a conservacionistas por parte de la Consejería", asegura.