Foto: EUROPA PRESS
La consejera afirma que esta medida "ataca a las personas más vulnerables y atenta contra la equidad del sistema"
SEVILLA, 24 Sep. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio, ha anunciado que Andalucía no aplicará el copago en farmacia hospitalaria a partir del 1 de octubre e interpondrá un recurso de alzada en lo próximos días contra la Resolución del 10 de septiembre de 2013, de la Dirección General de Cartera Básica de Servicios del Sistema Nacional de Salud y Farmacia, que se publicó el pasado jueves, 19 de septiembre, en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
Según se indica en una nota, la consejera ya ha exigido la retirada de esta medida, ha dado las instrucciones para que se formalice esta posición en la próxima Comisión de Farmacia del Consejo Interterritorial que se celebrará el próximo 1 de octubre. En este sentido, reitera que la Junta de Andalucía "está absolutamente en contra" de la medida adoptada por el Ministerio de Sanidad del Gobierno de España que plantea que los pacientes tengan que abonar parte del coste de los medicamentos que se dispensan en las farmacias de los hospitales de forma ambulatoria.
Esta resolución, que se ha hecho pública por parte del Ministerio sin informar previamente a las comunidades autónomas ni acordarlo en el seno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, es una improvisación y no se recogió de forma explícita en el Real Decreto 16/2012. Para la Junta de Andalucía, se trata de una medida totalmente injusta que afecta directamente a 90.000 personas en la comunidad autónoma y que atenta contra la equidad del sistema castigando, una vez más, a los colectivos más vulnerables.
El recurso de alzada está motivado, principalmente, por los perjuicios que este nuevo copago supondrá para la salud de los pacientes y podría tener graves perjuicios para la ciudadanía, ya que se corre el riesgo de que haya pacientes que pudieran renunciar a su tratamiento al no poder hacer frente al nuevo copago implantado por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.
La "improvisación" del Gobierno central hace "inviable" la implantación de este nuevo sistema de copago a 1 de octubre dada la complejidad del proceso burocrático y administrativo que tendría que desarrollar el sistema sanitario público andaluz. Para ponerlo en marcha, con el menor perjuicio a la ciudadanía, la Administración sanitaria andaluza tendría que cambiar el funcionamiento de todo el sistema de información de farmacia hospitalaria para enlazarlo con el sistema de Receta XXI y con el de facturación.
El Gobierno andaluz reitera, por tanto, el "rechazo" a esta medida, a la vez que espera su retirada por parte del Ministerio "dado el perjuicio que ocasionaría a aquellos pacientes más vulnerables tanto desde el punto de vista sanitario como social".