BARCELONA 4 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los fragmentos de cráneo desenterrados en el yacimiento de Venta Micena de Orce (Granada) en 1990, con una antigüedad de 1,5 millones de años, y que presentaban una anatomía desconocida en relación a los bóvidos europeos del Cuaternario, pertenecen en realidad a una especie de búfalo asiático del género Hemibos.
Así lo ha constatado un equipo de cuatro científicos, tras más de 20 años de investigaciones y comprobaciones entre fósiles similares de Europa, África y Asia, que publican ahora un artículo en la revista 'Quaternary International'.
El hallazgo de Orce de 1990 desveló fragmentos de huesos frontales y parte del parietal de un gran bóvido de entre 350 y 450 kilogramos que había sido atacado por una hiena gigante, si bien los investigadores dudaban sobre la posibilidad de que este animal fuera exclusivo de la Península Ibérica.
El trabajo está firmado por Sergio Ros-Montoya y Patrocinio Espigares, paleontólogos del Museo de Prehistoria y Paleontología de Orce; el investigador adscrito al Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social (Iphes), Bienvenido Martínez-Navarro, y el catedrático de Paleontología de la Universidad de Málaga, Paul Palmqvist.
En concreto, los investigadores han contrastado la similitud de estos fragmentos de cráneo con otros presentados en 2004 por el Instituto de Paleontología de Vertebrados y Paleoantropología de Pekín, lo que les lleva a afirmar que los fósiles "solapan anatómicamente".
Martínez-Navarro ha precisado que se trata de un descubrimiento "espectacular", puesto que pone de relieve que este tipo de búfalo habitó la cuenca del Guadix-Baza en el Pleistoceno inferior y del que hasta la fecha no se tenía constancia en Europa, y pone de relieve que la Península Ibérica no estaba aislada entonces de la evolución de la fauna en Euroasia.
"Esto prueba que a lo largo de las latitudes medias del continente euroasiático hubo importantes conexiones faunísticas", ha señalado el paleontólogo en un comunicado del Iphes.