Una de cada dos personas adultas tiene una enfermedad crónica en la comunidad autónoma y 100.000 presentan múltiples patologías
SEVILLA, 30 Abr. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio, ha manifestado este miércoles en sede parlamentaria la decidida apuesta que desde Andalucía se realiza para afrontar los retos de la cronicidad. Así, se han desarrollado estrategias y programas que permiten ofrecer una asistencia integral, como es el Plan Andaluz de Atención Integrada a Pacientes con Enfermedades Crónicas. Además, se ha favorecido la continuidad asistencial, se han aprovechado los beneficios que aportan las nuevas tecnologías, se ha potenciado el trabajo de la enfermería, se ha puesto en marcha la Escuela de Pacientes y se ha creado el Observatorio de Prácticas Innovadoras en el Manejo de Enfermedades Crónicas Complejas.
En Andalucía, una de cada dos personas adultas tiene una enfermedad crónica y nueve de cada diez de estos pacientes son mayores de 75 años. Igualmente, se calcula que existen unas 100.000 personas que sufren varias patologías (pacientes pluripatológicos) y que casi medio millón de andaluces tiene prescrito cinco medicamentos diferentes para sus problemas de salud. La artrosis de rodilla, el colesterol elevado y la hipertensión arterial son las tres enfermedades crónicas más frecuentes en la comunidad.
El Plan de Atención Integrada a Pacientes con Enfermedades Crónicas se basa en un modelo de atención que da protagonismo a la Atención Primaria, nivel asistencial desde el que se prioriza la prevención, afrontando los determinantes sociales que están en la base de la mayoría de los problemas crónicos de salud.
Sánchez Rubio ha recordado, asimismo, el valor de la estrategia de envejecimiento activo, con la que la Comisión Europea ha reconocido Andalucía como región de referencia en Europa.
La consolidación de los procesos asistenciales integrados, como el referido al paciente pluripatológico, ha sido otra herramienta clave en el modelo de atención integral. Son actualmente un total de 44 procesos asistenciales los vinculados directamente con la cronicidad.
Al igual que resulta reseñable, para Sánchez Rubio, la posición de ventaja en la implantación de tecnologías aplicadas a la salud, como la historia clínica digital y la receta electrónica, con aplicaciones especialmente útiles para este colectivo de pacientes. El uso de la receta electrónica, por ejemplo, ha evitado 50 millones de consultas de Atención Primaria, al evitar que el paciente crónico tenga que acudir periódicamente a la consulta del médico de familia para retirar las recetas de continuación del tratamiento prescrito. Esas consultas evitadas se han podido reinvertir en atención sanitaria.
Salud Responde también ha tenido un papel muy importante en aras de la continuidad asistencial, gracias al seguimiento telefónico de pacientes frágiles, la telemedicina o los cuidados paliativos. Todos estos servicios son accesibles con sólo pulsar un botón, el de la Teleasistencia.
Sánchez Rubio ha concluido que sólo se podrá abordar con éxito el desafío de las enfermedades crónicas si se promueve una sociedad en la que los individuos, las familias y las comunidades puedan alcanzar su máximo potencial de bienestar y autonomía, y en la que trabajar por la salud se asuma como una tarea de todos y todas.