La redacción de un mapa de 'puntos negros' precederá a otras iniciativas como limpieza de arcenes, resaltes o subidas de vallado
SEVILLA, 15 Mar. (EUROPA PRESS) -
La experiencia de los trabajos realizados, en el marco de los proyectos europeos LIFE, en el área de Doñana-Aljarafe para evitar los altos índices de mortandad de ejemplares de lince ibérico por atropello se trasladará a diferentes zonas de Sierra Morena con el fin de disminuir la mortalidad por esta causa de esta especie en peligro de extinción, después de que en los últimos tiempos se haya producido un repunte en el número de fallecimientos en las zonas del valle del Guadalmellato (Córdoba) y Guarrizas (Jaén).
A esta conclusión se ha llegado, según ha explicado a Europa Press el director general de Gestión del Medio Natural de la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, Javier Madrid, tras una reunión recientemente celebrada entre aquellas entidades que tienen competencias en la infraestructura viaria y ferroviaria de la comunidad --el Ministerio de Fomento, la Consejería de Fomento y Vivienda y el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF)--, con la presencia de WWF-España.
Madrid ha expuesto que los accidentes surgen como consecuencia del proceso de expansión del lince en el entorno, "lógico y normal en un felino", mediante efectos de ciclo concéntrico, según el cual los ejemplares que crecen se asientan en un entorno desplazando a otros que anteriormente ocupaban ese lugar.
Así, en Guadalmellato --donde se produjo la última muerte, hace pocos días-- y Guarrizas se ha detectado un repunte en estos tipo de incidentes, sobre todo motivados por el hecho de que los animales, "en época de celo o en expansión de poblaciones, atraviesan la infraestructura y son atropellados".
Toda vez que en el entorno natural de Doñana se puso en marcha una batería de medidas para paliar una problemática similar, experiencia cuyos resultados han sido "muy positivos" al haber bajado "considerablemente" esta clase de accidentes, la Junta plantea extrapolar este 'modus operandi' a estas zonas de expansión, donde las muertes se producen por estos sucesos "a pesar del esfuerzo tremendo que realizamos en la concienciación con cazadores, propietarios de fincas y, en general, el sector de la sociedad que reside o gestiona en estos lugares".
Para el director general de Gestión del Medio Natural, "los resultados están por debajo de lo admisible en cuanto al número de accidentes", por lo que "no podemos quedarnos de brazos cruzados". De este modo, se ha iniciado una colaboración conjunta en la cual, en primer lugar, se redactará un mapa para determinar los 'puntos negros' y, en función de los mismos, sopesar cuáles son las medidas más idóneas.
SEÑALIZACIONES DE ADVERTENCIA
Entre éstas, ha citado el incremento de la altura del vallado o la instalación de iniciativas disuasorias para que el lince no trepe en zonas próximas a tendido férreo, la instalación de resaltes y señalización de advertencia y concienciación en la carretera o, una de las más importantes, la limpieza de arcenes, ya que el animal "suele ocultarse en matorrales, y la idea es que el conductor pueda ver con tiempo al lince, y éste al coche, y ambos se respeten mutuamente".
"Es el problema que hay cuando alguien es punta de lanza, estamos aprendiendo continuamente", ha admitido, para congratularse de que la reunión fue "bien", puesto que "todo el mundo está bastante concienciado y apuesta por llevar a cabo aquellas actuaciones que de alguna manera puedan disminuir los efectos negativos de las infraestructuras sobre los linces".
En resumidas cuentas, la Junta pretende coordinar los trabajos de mantenimiento en las vías para reducir los accidentes con fauna silvestre y la creación de franjas de paso seguro, sin costes adicionales.
Iberlince da continuidad al trabajo realizado en los últimos años desde Andalucía para propiciar la recuperación del lince ibérico, considerado el mamífero carnívoro más amenazado de Europa. La iniciativa permitirá mejorar las poblaciones de conejos, aumentar el área de presencia de la especie por expansión natural, consolidar las áreas de reintroducción de Guadalmellato y Guarrizas y de conexión entre estas y los núcleos de Andújar y Cardeña.
El objetivo común es incrementar la población de este felino en un 66 por ciento en los próximos cinco años, disminuyendo el grado de amenaza de la especie, proponiendo su reclasificación a la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) a una categoría de menor amenaza según los criterios internacionales.