Descubren una nueva especie de araña con espinas en un yacimiento de Teruel

Araña con espinas en las patas
UNIVERSIDAD DE BARCELONA
Actualizado: martes, 12 febrero 2013 14:34

MADRID/TERUEL 12 Feb. (EUROPA PRESS) -

Un equipo internacional de científicos que trabaja en el yacimiento de Sant Just (Teruel) han descubierto una extraña especie de araña con espinas en sus patas, que lleva atrapada en ámbar unos 100 millones de años. El hallazgo, publicado en la revista 'Journal of Systematic Palaeontology', ha sido 'bautizado' con el nombre de 'Spinomegops aragonensis'.

Se trata de una araña que pertenece a la familia Lagonomegopidae, que presentaban una distribución muy amplia durante el Cretácico. Todo parece indicar que no sobrevivieron a la gran extinción que tuvo lugar a finales de este periodo y que acabó con los dinosaurios.

Los lagonomegópidos, de hábitos y parentesco inciertos, se caracterizaban por presentar dos ojos de gran tamaño en posición lateral, hecho desconocido en las arañas actuales. Pero, además, la nueva especie del ámbar de San Just presenta abanicos de espinas en los dos primeros pares de patas. Los expertos han explicado que esta característica habría aumentado la capacidad prensil de la araña a la hora de capturar a sus presas.

La nueva especie hallada en Teruel vivió durante el Cretácico, hace unos 110 millones de años, cuando el territorio ibérico era una isla y presentaba un clima subtropical.

Existen ejemplares similares al ahora descubierto, como en los ámbares cretácicos de Nueva Jersey (Estados Unidos), de Yantardakh (Rusia) y del Lago Cedar (Canadá). Sin embargo, los científicos han indicado que, con este hallazgo el ámbar español se convierte en el más diverso en este enigmático grupo de arañas y permite incrementar el conocimiento acerca de su ecología y de sus posibles relaciones evolutivas.

Los autores de este trabajo de investigación son Ricardo Pérez de la Fuente del Departamento de Estratigrafía, Paleontología y Geociencias Marinas de la Facultad de Geología de la Universidad de Barcelona; Erin Elizabeth Saupe, del Instituto Paleontológico y Departamento de Geología de la Universidad de Kansas (Estados Unidos) y Paul A. Selden, también de la Universidad de Kansas y del Departamento de Ciencias de la Tierra del Museo de Historia Natural de Londres.