Oliván reconoce que "a nadie le gusta" que le suspendan en dependencia, pero prefiere valorar "datos oficiales"

Dice que no han conseguido su objetivo de que en el último trimestre de 2012 unos mil dependientes recibieran servicio en vez de prestación

ZARAGOZA, 31 Ene. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Sanidad, Bienestar Social y Familia del Gobierno de Aragón, Ricardo Oliván, ha reconocido que "a nadie le gusta que le digan que suspende" en atención a la dependencia, pero "me gustaría valorar datos oficiales".

El consejero se ha pronunciado así en rueda de prensa, tras dar a conocer el Observatorio de la Dependencia que Aragón ha suspendido por primera vez en atención a la dependencia desde la entrada en vigor de la ley.

Al respecto, ha puntualizado que ese "no es un observatorio oficial" y ha opinado que "es un trabajo que tiene que hacer el IMSERSO (Instituto de Mayores y Servicios Sociales), que, de hecho, ya está haciendo, para que, de una vez por todas, nuestro país cuente con una estadística en materia de dependencia oficial".

En este sentido, ha argumentado que "tan importantes son los datos, como las interpretaciones" y "cuando se analizan estadísticas, hay que tener en cuenta todos los conceptos que hay detrás de ellas porque, por ejemplo, cuando hablamos de que Aragón ha bajado" el número de dependientes atendidos "hay que tener en cuenta que una de las razones principales del descenso es que nosotros no contabilizamos a personas fallecidas".

El consejero ha añadido que "si comparamos junio de 2011", donde estaban contabilizadas unas 3.000 personas como beneficiarias de la dependencia ya fallecidas, con diciembre de 2012, "donde no constan estas personas", que fueron retiradas de las estadísticas, y otras 1.500 "que después fuimos depurando y que también estaban fallecidas", "evidentemente la diferencia es obvia, pero no quiere decir que haya menos personas vivas atendidas".

Por otra parte, ha esgrimido que "en materia de dependencia, nuestra prioridad máxima es atender lo mejor posible a los dependientes" y eso significa que "no consiste en que haya muchos dependientes atendidos, sino que los que haya estén bien atendidos, dentro de las posibilidades que tengamos" y "en esta línea vamos a trabajar".

Según ha expuesto, "me preocupa que haya dependientes que no han recibido todavía la prestación, pero más preocupa que haya dependientes que la estén percibiendo, pero no con la calidad" oportuna.

CARÁCTER EXCEPCIONAL

El consejero ha subrayado su apuesta por los servicios, "que es lo que marca la ley" y "lo único que garantiza que al dependiente se le atiende en condiciones", servicios profesionales como residencias, centros de día, ayuda a domicilio y teleasistencia, ha dicho, "y, con carácter excepcional, y siempre que no haya otro remedio, atendiendo a circunstancias concretas de determinada personas totalmente excepcionales, la prestación económica en el entorno familiar".

Esta última "es lo que, por desgracia, ha prevalecido en Aragón y no garantizaba una adecuada atención al dependiente, como los hechos demuestran" y por eso "nuestro trabajo se va a centrar, más que en aumentar el número de dependientes, que lo intentaremos con nuestros recursos, en atender lo mejor posible a los que tengamos".

Por otra parte, ha reconocido que no han conseguido el objetivo que se habían fijado para que en el último trimestre de 2012 unos mil dependientes pasaran de percibir la prestación económica en el entorno familiar a servicios, "aunque sí ha habido algún caso".

Según ha apuntado, los cambios en la gerencia del Instituto Aragonés de Servicios Sociales "han supuesto un pequeño retraso en algunas cuestiones que queríamos acometer", pero "uno de los trabajos fundamentales que estamos abordando en la Mesa por la Discapacidad va en esa línea" porque "es la única solución que hay para mantener unos mínimos de calidad en el servicio y cumplir la ley, que está por encima de todo".