ZARAGOZA 21 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Zaragoza, PSOE-CHA, ha decidido hoy encargar la redacción del anteproyecto de la línea de tranvía norte-sur optando por un trazado de cerca de 13 kilómetros, que unirá Parque Goya y Valdespartera, pasando por el centro, y que costará unos 325 millones de euros --255 millones en obra civil y 70 en material móvil--.
La línea partirá de Parque Goya II, pasando por el Centro Politécnico Superior, siguiendo por plaza Helios, Puente de Santiago y Mercado. Allí se tiene que definir si continuaría por Coso, Plaza España, Plaza Basilio Paraíso, o por Puerta del Carmen, Paseo Pamplona y Plaza Paraíso.
A partir de ese punto el trazado irá por Gran Vía, Fernando el Católico, Isabel la Católica y plaza de Zaragoza. Este trazado supone la elección de la alternativa 0 de las ocho barajadas en el estudio de viabilidad realizado por la Oficina del Transporte Intermodal de Zaragoza (OTIZA) --seis en superficie y dos subterráneas--, incluyendo en el trayecto por el centro de la ciudad la variante que ofrece la opción 2 sobre la 0. Ambas tienen unos siete kilómetros.
Además, se agregan las dos prolongaciones contempladas desde plaza Zaragoza hasta Valdespartera, en la zona sur, y la prolongación que va desde el CPS hasta Parque Goya, en el trazado norte. Esto supone incrementar la línea hasta cerca de los 13 kilómetros.
El primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Zaragoza, Carlos Pérez Anadón, argumentó que el modelo de tranvía que se propone se utiliza "en una buena parte de las ciudades con mayor calidad de vida de Europa" y se enmarca dentro de un plan intermodal de transportes para Zaragoza y su entorno, que supondrá "un modelo de urbanización distinto, la remodelación de una buena parte de las zonas afectadas por las líneas, y un cambio espectacular con todo lo que es la parte medioambiental y de contaminación".
En su opinión, la decisión tomada "no es fruto ni del romanticismo ni de ninguna locura pasajera" porque "cuando llegamos aquí nos encontramos con diferentes estudios encargados por el PP" en la anterior legislatura, siempre hablando del tranvía y en ocasiones de una línea norte-sur, mientras que el PAR apuesta en su programa de 2003 por un metro ligero, dijo. Agregó que a pesar de que se había tratado de llegar a un consenso con la oposición "no ha sido posible".
FIN A DIEZ AÑOS DE TITUBEOS
El teniente de alcalde de Urbanismo, Antonio Gaspar, resaltó que hoy "se pone fin a más de diez años de titubeos, dudas, estudios parciales e intenciones que nunca se han llegado a concretar". Asimismo, explicó que para la elección del trazado "se han tenido en cuenta muchos factores, como el entorno urbano, el precio de billete, la calidad de vida y los desplazamientos".
Gaspar agregó que no sólo se trata de la creación de una línea de tranvía norte-sur sino que también se va a actuar en espacios peatonales, zonas verdes, carril bus, carril bici y aparcamientos. Por eso, la decisión de hoy va a tener "enormes consecuencias en la estructura de la ciudad, en la movilidad y en la calidad de vida de los ciudadanos de Zaragoza".
Respecto al rechazo de PP y PAR a esta línea de tranvía, Antonio Gaspar aseguró que "si no estuviéramos a un año de las elecciones municipales estas discrepancias no existirían", algo que consideró "triste" después de haber conseguido llegar a acuerdos con el Ministerio de Fomento para que financie la red de cercanías, y con el Gobierno de Aragón, así como con los 27 municipios del consorcio del transporte, "algunos de ellos gobernados por PAR y PP".
Por eso, pidió a la oposición un ejercicio de "responsabilidad de cara a los ciudadanos, aunque estemos en periodo electoral" para "estar a la altura de las circunstancias" puesto que "quedan todavía ocho meses para gestionar la ciudad".
TOMA DE DECISIÓN
El primer teniente de alcalde comentó que la decisión tomada por la junta de gobierno municipal se ha producido tras resolver las 37 alegaciones presentadas al estudio de viabilidad: tres de organizaciones patronales y sindicales; cuatro de colegios profesionales; 12 de partidos políticos --una del PAR, otra de IU y 10 del PP--; cuatro de asociaciones de vecinos y 14 de particulares.
De las 37 alegaciones se han deducido unas 141 observaciones, "de las que 33 se van a considerar e incorporar". De ellas, 45 son sobre factores que no están relacionados con la variante de tranvía norte-sur, 46 valorarán las distintas alternativas, y el resto se refieren a problemas procedimentales.
Además, se han tenido en cuenta los aspectos económicos, funcionales --tiempos de recorrido, velocidad, ahorro de tiempo en desplazamientos y demanda--, aspectos relacionados con el tráfico, medioambiente, plazos de ejecución y grado de dificultad en su implantación.
PLAZOS
El anteproyecto de la línea encargado hoy podrá estar realizado en dos mes. Entonces deberá salir a información pública antes de su aprobación definitiva durante otros dos meses. Paralelamente, se deberá avanzar en la redacción de los pliegos de licitación.
Una vez superado ese proceso se podrá licitar el proyecto. Según Pérez Anadón, el objetivo es que "a mitad del año que viene podamos estar en disposición de adjudicar" la obra, es decir, "dejar a la nueva corporación en disposición técnica para adjudicar" esta línea de tranvía.
En caso de que el nuevo equipo de gobierno resultante de las elecciones municipales de mayo de 2007 impulsara este proyecto, y teniendo en cuenta que el plazo de ejecución es de unos dos años, los zaragozanos podrían ver la línea de tranvía en funcionamiento en el verano de 2009, si no surgiera ningún problema en su ejecución.
De esta forma, se descarta la posibilidad de que para el verano del 2008, cuando se celebre la Expo, haya algún tramo en funcionamiento. Antonio Gaspar, que había defendido esa posibilidad, comentó que, "las tareas administrativas y políticas han sido complejas y han hecho que nos encontremos en estos momentos tomando esta decisión, aunque estamos debatiendo (sobre este proyecto) desde el año pasado".
FINANCIACIÓN
La financiación de la línea norte-sur se realizará en un 50 por ciento a través de su explotación y en otro 50 a través de las aportaciones de las administraciones públicas --Gobierno de Aragón y Ayuntamiento de Zaragoza--, aproximadamente. Las dos administraciones tienen previsto hacer su aportación a través de las plusvalías que obtengan de Pla-Za, el polígono tecnológico del reciclado y el barrio del Ave.
PLAN DE TRANSPORTES
La línea de tranvía norte-sur es fruto del protocolo de colaboración entre el Ayuntamiento de Zaragoza y el Gobierno Aragón de febrero de 2004 que plantea la mejora de la situación de los transportes en Zaragoza y su zona de influencia y la implantación en la capital aragonesa de su sistema de transporte de gran capacidad.
El citado documento "obliga a las dos instituciones a impulsar esta línea", pero también a diseñar un plan intermodal de transportes, "recién concluido", según informan fuentes municipales. Este plan dotará a la ciudad de intercambiadores, carriles bus, red de cercanías, carriles bici y zonas peatonalizadas y su debate ciudadano comenzará en septiembre, agregan. El plan incluye 24 kilómetros de tranvía --tres líneas--. Además, se contempla una línea que combine metro y cercanías con un trazado este-oeste.
El protocolo firmado entre Ayuntamiento y DGA incluye la creación de un consorcio de transportes, órgano encargado de articular la cooperación técnica, económica y administrativa entre todas las instituciones que se impliquen en la modernización del sistema de transportes de Zaragoza y su entorno. El Boletín Oficial de Aragón publicó ayer los estatutos de este organismo.