CALATAYUD (ZARAGOZA), 16 (EUROPA PRESS)
El Ayuntamiento de Calatayud rinde homenaje mañana sábado, 17 de octubre, a Jaime Teófilo Tabuenca Pinilla, concejal socialista en el Consistorio de Calatayud que fue asesinado en julio de 1936, al inicio de la Guerra Civil española, y cuyos restos han sido exhumados e identificados por la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) este verano.
Desde el Ayuntamiento de Calatayud se concederán a Jaime Tabuenca los mismos honores que en el caso de fallecimiento de un concejal, con la imposición de la bandera y la insignia de la ciudad tal y como se recoge en el Reglamento de Protocolo, Honores y Distinciones del consistorio.
El alcalde de Calatayud, Víctor Ruiz, asegura que por parte del Ayuntamiento existe "una obligación moral y ética" para organizar este acto, tanto en cumplimiento de la Ley de la Memoria Histórica como para "cumplir con el deseo de la familia de dar sepultura a un concejal bilbilitano que fue asesinado".
El acto municipal se realiza el mismo día en el que la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica va a entregar los restos de Jaime Teófilo Tabuenca a sus familiares, entre ellos su hija, Ester Tabuenca, de 78 años de edad, y un sobrino del fallecido, quien fue testigo presencial del asesinato en 1936.
Su colaboración ha sido imprescindible para localizar esta fosa, en la que, además, se encontraron los restos de Daniel Quintana, directivo de la CNT en la rama metalúrgica.
La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica no ha conseguido localizar a familiares de Quintana. Los que sí asistirán al acto del sábado son los descendientes de Jaime Tabuenca, entre ellos su hija.
Los actos comenzarán a las 17.00 horas en el antiguo Ayuntamiento bilbilitano, donde se realizará el acto institucional. Después, los restos de Jaime Teófilo y de Daniel Quintana, de 36 y 50 años aproximadamente en el momento de su muerte, se trasladarán hasta el cementerio de Calatayud para darles sepultura.
La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica trasladó en julio los restos de los dos sindicalistas asesinados en 1936 hasta su laboratorio en el campus de Fonferrada, de la Universidad de León, para realizar la identificación de los restos.