Esta iniciativa pionera en Cantabria será presentada al Ministerio de Vivienda al que se solicitará una subvención de 39.000 euros
SANTANDER, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -
Gesvican construirá ocho viviendas de promoción pública en Villabáñez (Castañeda) en las que se aprovechará el calor del subsuelo y se transformará en energía eléctrica.
Se trata de una iniciativa pionera en Cantabria y que se aplicará en estas viviendas cuya construcción quedó adjudicada ayer en el Consejo de Administración de GESVICAN, con un presupuesto de 898.760 euros, según informó hoy la Consejería de Obras Públicas, Ordenación del Territorio, Vivienda y Urbanismo en un comunicado.
El departamento que dirige José María Mazón explicó que las viviendas tendrán una instalación de calefacción radiante por agua, que obtendrá el calor del subsuelo. Lo hará a través de un circuito que saldrá del recinto doméstico recorriendo un tramo hasta la profundidad que determine un estudio geológico, donde el agua captará el calor del terreno para su utilización doméstica.
Esta instalación se complementará con una caldera eléctrica (denominada bomba de calor), situada en la vivienda, que tendrá un pequeño consumo, ya que el agua llegará previamente calentada.
Este proyecto, gracias al cual la energía geotérmica se aplicará a la producción de agua caliente sanitaria y de la calefacción, será presentado por el consejero al Ministerio de Vivienda para la obtención de una subvención de 39.000 euros que se destinarán a financiar esta iniciativa pionera.
INSTALACIÓN
Las viviendas dispondrán de una instalación de calefacción, por medio de una bomba de calor que utilizará la energía geotérmica como fuente de alimentación. Este tipo de técnica permite extraer calor o frío del suelo, mediante sondas introducidas a gran profundidad, y su posterior traslado a las viviendas para su climatización.
A partir de 10 metros de profundidad, la temperatura del suelo se mantiene constante a lo largo de todo el año. En este punto, según se aumenta la profundidad, el gradiente geotérmico se incrementa 3 grados cada 100 metros.
Esto proporciona a la bomba de calor un ritmo de funcionamiento, en condiciones de evaporación, más elevado que un sistema convencional, permitiendo no depender de las condiciones ambientales exteriores.
Para abastecer la demanda térmica de las viviendas será necesaria la colocación de una instalación geotérmica de captación vertical, con una bomba de calor agua-agua, e intercambiadores o sondas para la extracción de energía de subsuelo.
La instalación vendrá precedida de un estudio geológico que determinará los parámetros técnicos de conductividad térmica del terreno y su resistencia a la perforación.