SANTANDER 19 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Consejería de Educación, Cultura y Deporte ha sometido a información pública, por el plazo de un mes, el expediente para la declaración de la música y el tañido del rabel como Bien de Interés Cultural (BIC) Etnográfico Inmaterial "por definir, por sí misma, un aspecto destacado de la cultura de Cantabria".
Los interesados podrán examinar el expediente en el Servicio de Patrimonio Cultural de la Consejería y formular las alegaciones que estimen procedentes dentro del plazo.
Este expediente se une a los dos publicados ayer en el BOC para la declaración de las marzas y del juego de los bolos como Bien de Interés Cultural (BIC) Etnográfico Inmaterial.
Cultura anunció en mayo que el juego de los bolos, la música y el tañido del rabel y las marzas serían los primeros Bienes de Interés Cultural Inmateriales de Cantabria y que contarían con esta distinción a final de año.
Los expedientes se ha incoado a iniciativa del Gobierno de Cantabria, que quiere preservar y poner en valor esta "cultura viva", que además es la primera que se declara en la región siguiendo la recomendación de la UNESCO de promover los BIC inmateriales.
La tradición del rabel se ha mantenido profundamente arraigada en la región, considerándose una de las más populares y emblemáticas. El rabel y su música han constituido una forma de expresión del pueblo de Cantabria y de su cultura. Se ha vinculado desde la Edad Media a ámbitos rurales, siendo el instrumento más popular de la época. El uso del rabel se fue transmitiendo de generación en generación, así como los bailes, coplas y romances a los que acompaña su música.
Existe constancia del empleo del rabel en Cantabria desde el siglo XVIII y su música actualmente pervive con su evolución propia y su técnica de ejecución.
Las marzas, que se celebran la última noche de febrero y primera mañana de marzo, no son exclusivas de Cantabria aunque alcanzan en la comunidad una pervivencia y predicamento fuera de toda duda; en la región mantienen una vigencia notoria y son merecedoras de protección y promoción.
Los bolos son el deporte tradicional por antonomasia en Cantabria. Los orígenes de este juego en la región se sumergen en la noche de los tiempos, con vinculaciones con otras prácticas lúdicas en diferentes lugares de España y Europa.
Las distintas modalidades que en Cantabria se practican, cuatro en la actualidad (bolo palma, pasabolo tablón, pasabolo losa y bolo pasiego), son la manifestación de una herencia transmitida de generación en generación.