SANTANDER 20 Oct. (EUROPA PRESS) -
Salvador Calvo ha sido el primer ultrafondista en superar el "Desafío Cantabria" al llegar a la meta de Espinama realizando un tiempo de 11'43 en el trayecto que separa la mar y la montaña, la playa del Tostadero en San Vicente de la Barquera y la meta lebaniega, todo ello tras recorrer 87 kilómetros con cerca de 12.000 metros de desnivel.
La segunda posición ha sido para el madrileño Rafael Martín a 24 minutos de distancia, y la tercera plaza para el navarro Sergio Aramendia. En féminas la victoria ha sido para la también leonesa Mar Ferreras que llegó a meta tras 14 horas y 28 minutos, según ha informado la organización.
Un total de 139 deportistas tomaron la salida de esta espectacular prueba en la medianoche de viernes en la playa de San Vicente de la Barquera. Con una condiciones climatológicas muy favorables, la prueba se desarrollo sin incidencias reseñables, registrando una treintena de abandonos por motivos normales en una prueba de estas características.
Como era previsible Salvador Calvo se impuso con autoridad tras realizar una primera parte del recorrido junto al resto de favoritos, en la segunda parte del trazado, con la mayor dificultad, impuso su técnica, logrando una cómoda ventaja a partir del Collado de Cámara. En féminas también Mar Ferreras confirmó su posición de favorita.
La ultra train Desafio Cantabria recorrio los municipios de San Vicente de la Barquera, Val de San Vicente, Herrerías, Lamasón, Peñarrubia, Cillorigo de Liébana, Potes y Camaleño, mostrando en su trayecto la riqueza paisajística de Cantabria, por uno de los recorridos mas bellos de la región.
Desde el punto de vista técnico y a pesar del cambio final realizado en el recorrido por las lluvias y nevadas de los últimos días, ha mostrado su dureza, tanto a nivel físico como técnico, iniciándose con senderos y pistas sencillas pero que después se ha ido complicando en la zona media, con importantes desniveles y difíciles parajes que aumentan mucho la dificultad técnica. Estos problemas se acentuaron al final, en las zonas de alta montaña, con los más grandes desniveles.