SANTANDER 29 Jul. (EUROPA PRESS) -
El profesor del Departamento de Economía de la Universidad de Toronto, Diego Restuccia, ha advertido este viernes en Santander de que "un problema temporal de pagos en Estados Unidos va a afectar más a las economías europeas a largo plazo", ya que tendría consecuencias sobre "los retornos y las primas que los países de Europa van a pagar".
La eventual quiebra del país estadounidense, que se produciría a partir del 2 de agosto si las principales fuerzas políticas del país no alcanzan un acuerdo para aprobar una ley que permita aumentar el techo de deuda, está "más cerca" tras el bloqueo republicano de este jueves a la votación de la medida en el Congreso, y supondría, según el economista, una situación "sin precedentes".
Según ha informado la UIMP en nota de prensa, Restuccia, que ha participado en la 'Escuela de Macroeconomía 'Luis Ángel Rojo Duque': Empleo, productividad y crecimiento, una perspectiva internacional', organizada por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), en donde ha afirmado que el problema al que se enfrenta Estados Unidos es "muy distinto" al que encara Europa.
Restuccia ha destacado que los estadounidenses tienen un "problema fiscal" que es, a su juicio, "relativamente fácil de resolver" mediante una "combinación" de recorte de gasto e incremento de impuestos.
En Europa, en cambio, hay "una restricción muy grande", ha asegurado, ya que "la carga impositiva es elevada y las medidas aplicadas pasan por la reducción de gasto", lo que provoca una "contracción" de la economía a corto plazo.
Además, ha explicado que la productividad en EEUU "ha sido positiva y se espera que siga siéndolo", mientras que en Europa y "especialmente" en Grecia, Portugal y España, "la productividad no crece", por lo que los niveles de deuda que se afrontan no son "óptimos".
"PROBLEMA DE PRODUCTIVIDAD A LARGO PLAZO"
España y Europa se enfrentan, según el experto, a un "problema de productividad a largo plazo", agravado por el "problema coyuntural" de la crisis, algo que, en ningún caso se resuelve "saliendo del euro", posibilidad sobre la que mostró su preocupación.
Para solucionar la baja productividad, ha indicado que los países europeos deberán acometer "reformas estructurales en el sector laboral y financiero". En este sentido, ha valorado la crisis como "una oportunidad" para llevar a cabo estos cambios, ya que "en un periodo de bonanza serían más difíciles de negociar".
Las diferencias productivas entre países pueden explicarse, según Restuccia, por "políticas e instituciones que generan una mala asignación de recursos". "Una política muy típica en Europa es distorsionar el mercado laboral" regulando "la salida de trabajadores de las empresas", medidas que afectan principalmente a las sociedades "más grandes", ha indicado.
"Estas firmas grandes son generalmente más productivas", ha explicado el economista, de manera que estas políticas, que "tienen un costo laboral más alto" para las grandes empresas, favorecen a las pequeñas y provocan "efectos sobre la productividad".