El exdelegado del Gobierno contra la violencia de género destaca como "clave" la educación y la detección de las mujeres que sufren esta lacra
SANTANDER, 4 Sep. (EUROPA PRESS) -
El exdelegado del Gobierno contra la violencia de género y director de la Unidad de Igualdad de la Universidad de Granada, Miguel Lorente, cree que es "fundamental" desmontar los "mitos" que reducen en redes sociales la violencia machista a "circunstancias particulares para entender que no hay una base común" a todos los casos de violencia y asesinatos que sufren las mujeres.
Así, ha alertado de un movimiento que tiene la estrategia de "quitar" el origen machista de esta violencia y "reducirla" a estas "circunstancias particulares", al tiempo que se ha preguntado "qué clase de sociedad" es una como la española en la que se generan "60 asesinatos de media" al año "desde la normalidad".
En este sentido, ha incidido en que los hombres que matan a las mujeres no forman parte de organizaciones criminales, "pero acaban asesinando" a sus parejas o exparejas, tal y como ha dicho en una rueda de prensa con motivo de su presencia dirigiendo el encuentro 'Violencia machista, cultura y sociedad', en los Cursos de Verano de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), en la que ha estado acompañado de la periodista y escritora Nuria Varela.
Lorente ha defendido que "la única forma" que hay para acabar con esta violencia no es insistir sobre las circunstancias particulares, sino sobre "lo común", en referencia al machismo y a la "desigualdad" de las mujeres. A este respecto, ha denunciado que el resultado de esta situación son "las cifras dramáticas" de 953 mujeres asesinadas desde 2003.
El exdelegado del Gobierno también ha comentado que en España se ha pasado a decir que estos crímenes eran "casos aislados" o un "crimen pasional" --como en el caso de Ana Orantes, asesinada en 1997--, a una situación en la que "no se puede negar la realidad violenta".
ESTUDIO DE SENTENCIAS DEL OBSERVATORIO DEL CGPJ
Durante este encuentro con los medios, Lorente ha enumerado una serie de datos extraídos de "todas" las sentencias (600) del Observatorio contra la violencia doméstica y de género del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) desde el año 2001 hasta el 2016.
Según este estudio basado en los "hechos probados" reflejados en estas sentencias, la forma "más frecuente" con la que los hombres matan a las mujeres es el uso del arma blanca (43,8 por ciento). En segundo lugar, están los traumatismos en la cabeza (11,9 por ciento), seguidos de la estrangulación a mano, a lazo o sofocación (7,4 por ciento) y del uso de armas de fuego (5,8 por ciento).
Igualmente, Lorente ha concretado que de estas sentencias se desprende que la media de puñaladas de los asesinatos es de 18,4; que en lo referido a las muertes por traumatismos craneoencefálicos, la media es de 18 golpes; y en cuanto a muertes por arma de fuego, la cifra media de disparos es de 2,9.
Además, ha sumado a estos datos que hay un 25 por ciento de asesinatos en los que los agresores usan "varias formas" para cometer el crimen, por lo que todo ello, a su juicio, es una demostración del "exceso de violencia" que hay en estos crímenes. En estos asesinatos, ha considerado Lorente, el hombre trata de "destruir" lo que ha significado la mujer.
SE COMETEN LOS ASESINATOS "CON PLENA CONCIENCIA"
Del mismo modo, ha destacado que en el estudio de estas sentencias se señala que el alcohol y los tóxicos actúan modificando la conducta del agresor en un 0,5 por ciento de los casos; anulando la conducta "en el sentido de la conciencia, la voluntad, la decisión, la determinación, en un 0 por ciento; que las alteraciones psíquicas que modifican la conducta que "no eximiendo" de responsabilidad actúan en un 7 por ciento; y anulando la voluntad en un 2 por ciento.
Por todo ello, el exdelegado del Gobierno contra la violencia de género ha reivindicado que la idea de que estos crímenes son "un problema de locos, alcohólicos o drogadictos" es "un mito" que "no se corresponde con la realidad", porque, ha añadido, la "inmensa mayoría" de los hombres que "terminan asesinando" a las mujeres lo hacen "con plena conciencia, con planificación, con premeditación".
Es decir, que desde su punto de vista, aunque pueda haber "hombres con rasgos de personalidad" o que consuman alcohol, pero que eso "no determina" la violencia, "no es la causa" de la violencia y no "exime" de responsabilidad.
"PACTO DE ESTADO CONTRA EL MACHISMO", EDUCACIÓN Y DETECCIÓN
Asimismo, Lorente se ha referido al Pacto de Estado contra la violencia de género, asegurando que se necesita un "Pacto de Estado contra el machismo", igual que lo hay, tal y como ha recordado, contra el terrorismo.
El experto, que ha recordado una macroencuesta de los años 2011-2015 según la cual en España hay unas 600.000 mujeres que sufren violencia de género y que entre un 70 y un 80 por ciento de las asesinadas no había denunciado previamente, ha reivindicado que la educación es "clave" para acabar con el "mito del amor romántico" y que hay que trabajar para "detectar la violencia" para "sacar" a las mujeres de ella.
En su opinión, la denuncia "no puede ser la única solución" y tampoco "la primera", entre otros motivos, porque la cifra de denuncias se ha mantenido en niveles "similares" durante los últimos diez años.
NURIA VALERA: "EL MAYOR DÉFICIT" DE ESPAÑA ES LA EDUCACIÓN
Por su parte, la periodista y escritora Nuria Valera ha denunciado que "el gran fallo" que tiene España como sociedad es "no haber incorporado" la igualdad y el respeto entre hombres mujeres en las aulas porque "el mayor déficit" español es la educación.
A este respecto, opina que España tiene el "fallo" de la "dejación" que se ha hecho en las aulas en esta materia y se ha preguntado "cómo es posible" que la educación a niños y niñas se siga haciendo "en desigualdad" con libros de textos "misóginos".
"Ningún niño nace violador, ningún niño nace maltratador", ha incidido Valera, que ha criticado que en los últimos años se "ha triplicado" el número de menores agresores y condenados por violencia de género y que se "ha disparado" el número de denuncias por violación entre menos de edad.