El alcalde lamenta el "sectarismo" del presidente de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico y espera que le releven
CAMARGO, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Camargo, el 'popular' Diego Movellán, ha recriminado al PSOE su "caradura" por "tratar como caballo de batalla política" el problema de los 'soplaos' que se producen en el municipio, y sobre el que se debatirá este lunes en el Parlamento de Cantabria.
En una entrevista con Radio Nacional de España (RNE) en la que ha participado Europa Press, Movellán ha lamentado que "aquellos que hablan de la memoria histórica y apelan a lo que pasó hace cuarenta años", en cambio "no recuerdan" su gestión en los últimos ocho años.
Una gestión caracterizada por "escurrir el bulto, engañar a los ciudadanos y no tratar a la gente en serio", ha censurado el regidor camargués, que ha asegurado que "si hubieran trabajado juntas" las tres Administraciones y la Confederación Hidrográfica del Cantábrico, "hoy los ciudadanos tendrían seguridad".
Además, ha recordado que los juzgados "ya han hablado" y establecido que "el único responsable" fue de la Confederación por autorizar las extracciones de agua. "A mayor extracción, mayor incidencia" de los hundimientos de suelos, ha aseverado Movellán.
Y en este sentido, el alcalde ha reprochado la actitud "muy sectaria" que ha percibido en la Confederación Hidrográfica, matizando que se refiere a quien "tenía la responsabilidad de liderarlo" y no a la institución, presidida en la actualidad por Jorge Marquínez y en la que "desea" que haya un relevo.
Movellán ha criticado que cuando se buscaban soluciones para un problema que ha provocado desalojos en el municipio, desde la Confederación hablaran como si se estuviera dando una "propina" a Camargo, cuando él considera que "es su responsabilidad".
En estos momentos, se elaboran informes sobre los suelos afectados por 'soplaos', en base a los cuales "parece" que "sí se va a poder urbanizar y edificar" en estos terrenos, pero con el matiz de que se exigirán determinadas condiciones o técnicas de edificación.
Esto supondrá un encarecimiento de la construcción en esos suelos, ha admitido el alcalde, pero a cambio, habrá "más garantías de que en los años siguientes no se va a ir la vivienda abajo".