Fuentes-Pila presenta las conclusiones de la primera reunión celebrada el pasado mes de julio, y anuncia un nuevo encuentro para septiembre
SANTANDER, 8 Ago. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del Grupo Regionalista, José María Fuentes-Pila, ha instado hoy al Ayuntamiento de Santander y en particular al alcalde, Iñigo de la Serna, a "liderar" la mesa de trabajo para la búsqueda de soluciones al fenómeno del botellón, cuyo objetivo es "sumar".
Fuentes-Pila ha presentado en rueda de prensa las conclusiones de la primera jornada de trabajo 'Santander ante el botellón': un espacio reflexivo en búsqueda de soluciones', impulsada por el PRC y celebrada el pasado mes de julio. Este documento ha de ser, a su juicio, "el primer paso que debe sentar las bases de la aproximación a posibles soluciones" a una realidad compleja.
En la mesa de trabajo participaron el Consejo de Estudiantes de la Univesidad de Cantabria (CEUC), el departamento de Juventud de UGT, Juventudes Socialistas (JSC) y Juventudes Regionalistas de Cantabria (JRC), la Asociación de Vecinos del Río de la Pila, la Federación Cántabra de Asociaciones de Vecinos (FECAV), las asociaciones El Río Suena y Bahía Sur Cultural, la Asociación de Hostelería, Delegación de Gobierno, Policía Nacional, Asociación de Policía Local y el PRC.
Según explicó Fuentes-Pila a preguntas de la prensa, el Ayuntamiento no alegó "ninguna" razón para no participar. Sin embargo, de cara a la segunda mesa de trabajo, para la que "buscarán fecha en septiembre", el PRC de Santander invita al Ayuntamiento y al alcalde no sólo a participar sino a "liderar" este proyecto que no pretende ser "una herramienta política, sino una herramienta de trabajo" para avanzar en la búsqueda de soluciones al botellón, un problema que "parece que no existe para algunas instituciones", agregó.
"El protagonismo lo tiene la ciudad, pero el timón lo debe llevar el Ayuntamiento", subrayó Fuentes-Pila, quien explicó que registrarán el documento con las conclusiones de la primera mesa de trabajo en el Ayuntamiento y también se lo remitirán al presidente del Gobierno, Ignacio Diego, el "único" desde el punto de vista político, dijo el regionalista, que "se disculpó por escrito" y mostró su interés por la iniciativa.
En la presentación de las conclusiones, Fuentes-Pila ha estado acompañado por Jesús Garay, presidente de la Asociación de Vecinos del Río de la Pila; Vicente Nieto, de Bahía Sur Cultural; y José Luis Ruiz Gallo, de la Asociación de Policía Local.
El portavoz regionalista ha matizado que el objetivo de esta mesa de trabajo y de las conclusiones del primer encuentro "no es erradicar el botellón, sino buscar soluciones", y ha subrayado que "escuchar la voz de todos es la única forma de alcanzar soluciones consensuadas, sostenibles y duraderas".
CONCLUSIONES
La primera conclusión del encuentro es, según explicó, la necesidad de celebrar nuevas mesas de trabajo. Las reflexiones se centran en cuatro ámbitos: el escolar, el familiar, los escenarios de ocio y tiempo libre de los jóvenes y la implicación de las Administración. Además, se distingue entre dos fenómenos diferenciados, el consumo de alcohol entre menores, una práctica que es necesario "controlar y erradicar", y el consumo de mayores de edad en la vía pública.
Una de las conclusiones de la mesa de trabajo es que los programas de educación para la salud "no son eficaces para generar cambios de conducta" y que es necesario "poner el acento en las capacidades de los jóvenes". También se aboga por el desarrollo de unidades de asesoramiento de familias con adolescentes para prevenir el consumo de alcohol.
Según relató Fuentes-Pila, entre los jóvenes existe una "percepción mayoritaria" de "ineficacia" de los programas públicos de ocio y tiempo libre, que "no son una alternativa real" al botellón. En este sentido, la mesa de trabajo aboga por encontrar "un perfil más atractivo" en el que las actividades se integren en los lugares donde los jóvenes beben, buscando espacios adecuados para que no se produzcan conflictos con los vecinos.
También se defiende la necesidad de "evitar la criminalización" que existe sobre este fenómeno, ya que afecta a la "autoestima" de los jóvenes, a su "legitimación" como parte de la ciudad. También se aboga por reforzar la participación de la sociedad civil a través del movimiento asociativo; y se alcanza un "cierto grado de consenso" en la posibilidad de definir espacios en los que se desarrollen proyectos de reducción de riesgos, fomentando un consumo responsable.
Para Fuentes-Pila, esta posibilidad es compatible con la realidad de nuestro país, que está "integrado tradicional y culturalmente en el consumo del alcohol, del que viven más de 25.000 familias" en España, dijo.
Respecto a las administraciones públicas, el documento recalca la necesidad de una mayor coordinación entre ellas y la importancia de evitar acciones y actividades impulsadas por ellas mismas en las que se fomenten el consumo de alcohol y otras sustancias.