TOLEDO, 4 Oct.(EUROPA PRESS)

El proyecto 'Torre apaga fuegos incendios forestales' se alzó hoy con el primer premio del IV Concurso de Ideas Innovadoras de Castilla-La Mancha, una idea que permitirá la extinción de fuegos mediante la instalación de árboles ficticios cargados con hasta 25.000 litros de agua cada uno en las zonas boscosas.

Así lo afirmó hoy el diseñador del proyecto Antonio Ibáñez de Alba, tras la presentación de las I Jornadas Nacionales de Innovación y Desarrollo Local y la entrega de los premios, donde también fue galardonado José Luis Benito por el proyecto 'Pupitre electrónico'.

Ibáñez, quien recibirá 5.000 euros por el premio, explicó que los árboles, con una altura de 30 metros, se dispondrán "en zonas rurales y en pueblos aislados" que permitirán ser los primeros en registrar los incendios, detectarlos, y "si superan los 50 centímetros de ancho" lanzar un "chorro de 5.000 litros de agua a 200 metros de distancia".

De este modo, los "incendios forestales serán casi nulos", porque "los cogemos en su inicio, es un invento prometedor, y con vías de que en España se puedan instalar en zonas de alto riesgo", dijo el galardonado.

El invento --dijo-- se pondrá en marcha en 2007, con "una primera plantación en Guadalajara", y será un medio de ayuda para los bomberos, que podrán recoger agua de su interior y cubrirse bajo éste cuando se vean "bordeados por el fuego", debido a que dispone de "una lluvia de un agente ignifugante" durante 24 horas

Además, indicó que su mecanismo "no precisa ningún tipo de energía, es un sistema innovador totalmente" puesto que dispone de un muelle que funciona con presión y desplaza hasta 200 toneladas de empuje.

Respecto al proyecto 'Pupitre electrónico', su inventor explicó que consiste en la producción, venta y soporte técnico de un pupitre que integra un ordenador para el desarrollo y conocimiento de las nuevas tecnologías, con una dotación de 3.000 euros por el galardón.

Benito reclamó la introducción de los sistemas informatizados en los medios educativos y solicitó apoyo al profesorado.

JORNADAS INNOVACIÓN y DESARROLLO.

Por su parte, en la inauguración de las primeras jornadas, el consejero de Industria y Tecnología, José Manuel Díaz-Salazar, apostó por la necesidad de potenciar la innovación, la investigación aplicada y producción industrial singularizada en las empresas para "apuntalar el crecimiento económico" en Castilla-La Mancha.

Las jornadas están organizadas en cooperación con el sistema de innovación regional y Centro Locales de Promoción e Innovación Empresarial (CLIPE) radicadas en once municipios, a través de la cooperación de los ayuntamientos y la Diputación.

Díaz-Salazar solicitó un apoyo del sector privado regional para "introducir el concepto de innovación" en las empresas, pero apuntó que no sólo en las multinacionales, sino en las pequeñas empresas y en las microempresas, para mejorar la competitividad frente a la "mundialización".

Advirtió de que de las 120.000 empresas que conforman Castilla-La Mancha el 90 por ciento tienen cinco o menos trabajadores y apostó por el uso de la innovación como medio de supervivencia.

Alabó las iniciativas premiadas en el IV Concurso de Ideas Innovadoras de Castilla-La Mancha como "emprendedores que apuestan por sacar al mercado productos tecnológicos" y valoró el uso de las Tecnologías de la Información, la investigación y la inteligencia para las empresas regionales en el mercado actual, puesto que sino "tenemos difícil encaje en el concepto de mundialización".

También, apostó por la "diferenciación" en el diseño de los productos, el uso de las TIC en la organización empresarial, la innovación y la investigación como medios para el mantenimiento de la economía de Castilla-La Mancha a las niveles de los últimos años, dijo.