TOLEDO, 7 Nov. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de la Asociación Española de Bioempresas (ASEBIO), Regina Revilla; el vicepresidente primero de ASEBIO, José María Fernández Sousa-Faro y el adjunto a la presidencia de ASEBIO, Jorge Barrero, se han reunido este jueves en Toledo con la presidenta de Castilla La Mancha, María Dolores de Cospedal, a quien han trasladado las oportunidades que representa la bioeconomía para esta comunidad.
Según ha informado ASEBIO en un comunicado, la Unión Europea ha situado entre sus prioridades el desarrollo de un modelo de crecimiento económico basado en fuentes de energía y materias primas renovables --de origen principalmente vegetal--, que pueda en el medio plazo disminuir nuestra dependencia de los combustibles fósiles y, en particular, del petróleo y posicionar a Europa como líder mundial en el desarrollo de este modelo alternativo, que se conoce como bioeconomía.
La asociación considera que la fortaleza del sector agrícola y alimentario castellano-manchego y la existencia de un cluster petroquímico en la región la convierte "en un territorio con gran potencial para abordar el reto de obtener energía y materiales alternativos a los derivados del petróleo a partir de residuos vegetales y otras fuentes renovables".
ASEBIO está trabajando con diversas comunidades autónomas, entre ellas de forma muy activa Castilla-La Mancha, para dedicar los próximos Fondos Europeos de Desarrollo Regional (FEDER) --muy centrados en innovación-- a financiar proyectos que demuestren la viabilidad de la bioeconomía para el desarrollo regional.
El pasado 25 de septiembre, ASEBIO reunió a numerosos expertos internacionales en Toledo, bajo el marco del proyecto BIOTIC coordinado por la patronal europea Europabio para debatir acerca de los retos pendientes en el continente para el impulso definitivo a la bioeconomía, y durante el encuentro con Cospedal los responsables de ASEBIO han trasladado las principales conclusiones de este encuentro.
"Tenemos la oportunidad de impulsar proyectos que generen empleo y riqueza mediante la transformación biotecnológica de residuos del campo y de la industria tradicional castellano-manchega (como el sector vitivinícola o lácteo) que pueden dar lugar a productos de alto valor añadido y respetuosos con el medioambiente", ha explicado la presidenta de ASEBIO, Regina Revilla.