GUADALAJARA, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -
Las obras de restauración del Monasterio de Santa María de Bonaval, en Retiendas, (Guadalajara) podrán ser visitables por el público esta primavera, circunstancia novedosa en intervenciones de este tipo, una vez que se pongan en marcha los trabajos de la primera fase de consolidación en el propio Monasterio. Las obras comenzarán el 1 de abril para evitar el periodo de condiciones climatológicas más adversas.
Así lo ha avanzado el consejero de Educación, Cultura y Deportes, Ángel Felpeto, quien ha explicado que hasta el momento, los técnicos han trabajado en la elaboración del Plan de Seguridad y Salud, "transcendental para garantizar las condiciones laborales de los trabajadores en una obra que se va a llevar a cabo en una ruina" y se han acometido trabajos de desbroce.
Según ha informado en nota de prensa el Gobierno regional, las obras de rehabilitación del Monasterio de Bonaval se adjudicaron el 30 de noviembre de 2017 y desde entonces se han venido acometiendo los trabajos previos necesarios en una intervención de estas características, pero ahora la dirección facultativa ha propuesto a los técnicos de Patrimonio que las obras en el propio Monasterio comiencen el 1 de abril para evitar el periodo de condiciones climatológicas más adversas.
Esta petición surge, según ha explicado el consejero, por dos circunstancias: de un lado porque las bajas temperaturas afectan al resultado de los materiales con los que será necesario trabajar en la consolidación del edificio y por otra parte, porque las obras a ejecutar en el Monasterio serán visitables al público durante su ejecución, por lo que es aconsejable ejecutarlas durante el periodo de primavera y verano.
Ante estas circunstancias, la Consejería ha aceptado la propuesta de la dirección facultativa que establece que los trabajos de obra en el Monasterio se ejecutarán del 1 de abril al 30 de septiembre.
El Monasterio de Santa María de Bonaval es un templo cisterciense fundado en 1.164. De lo que llegó a ser el edificio, solo se conserva parte de la iglesia, principalmente la cabecera, crucero, nave meridional, una sacristía adosada al ábside del Evangelio y algunos paredones.
Ante el avanzado estado de deterioro que presenta el inmueble, está previsto acometer su restauración en varias fases. En la primera fase, que es la que se está ejecutando en la actualidad, se pretende consolidar las estructuras, retirar la vegetación existente, controlar las humedades y permeabilizar. El presupuesto para esta primera fase de ejecución ronda los 400.000 euros.