La nueva federación es la resultante del proceso de fusión entre la de Enseñanza y la de Servicios Públicos y aglutina a 20.000 afiliados
VALLADOLID, 27 Jun. (EUROPA PRESS) -
La única candidata a ocupar la Secretaría de la Federación de Empleados y Empleadas de los Servicios Públicos de UGT en Castilla y León (FeSP-UGT CyL), Carmen Amez, se ha marcado como principales retos del nuevo cargo la lucha por mantener los "pilares del bienestar" y, al mismo tiempo, por recuperar los derechos económicos, sociales y laborales perdidos en los últimos cinco años por los trabajadores de los servicios públicos.
La hasta ahora secretaria de la FSP-UGT en Castilla y León, federación que culmina este viernes su fusión con la de Enseñanza (FETE), la última de toda España en acometer este proceso que se inició el pasado día 10 de mayo con el congreso constituyente federal, será proclamada esta tarde, casi con toda seguridad, la máxima responsable de esta nueva estructura fusionada y que, como novedad, no sólo representará ya a los empleados de las administraciones públicas sino a todos aquellos que trabajan para los servicios públicos, incluidos los dependientes de empresas privadas.
La federación resultante, fruto del congreso celebrado hoy en la Feria de Valladolid, con participación de un total de 169 delegados, de ellos 134 de la FSP y 35 de FETE, "es mucho más fuerte y consistente y permite reducir la estructura jerárquica", ha subrayado Amez en declaraciones recogidas por Europa Press, en referencia a que las dos ejecutivas se fusionan en una mixta, "lo que supone dar un gran paso adelante en eficiencia y eficacia" y permitirá dar cobertura a más de 20.000 empleados en la Comunidad, 15.000 de ellos de la FSP y más de 4.000 de FETE.
A la cita del congreso constituyente se ha sumado el secretario federal de la FeSP-UGT, Julio Lacuerda, quien se ha felicitado por el tiempo récord en que se ha cerrado el proceso de fusión de ambas federaciones en cada una de las comunidades autónomas y que ha cerrado Castilla y León, con lo que, como así ha incidido, la federación resultante se convierte, con 300.000 afiliados, en la primera del país en el ámbito de los servicios públicos.
Al igual que la anterior, Lacuerda ha explicado que la novedad de la nueva federación es que la misma trasciende el ámbito de las administraciones públicas para representar también a aquellos trabajadores que prestan servicios públicos, prestados tanto de forma directa por la administración como indirectamente a través de la empresa privada.