Silván lanza un mensaje de tranquilidad y se compromete a llegar a un acuerdo para evitar el despido de unos 1.800 empleados
LEÓN, 7 Nov. (EUROPA PRESS) -
Decenas de empresas forestales de Castilla y León se encuentran en una situación de crisis que desembocará en el cierre de compañías con los correspondientes despidos y la "muerte súbita" de las mismas si la Junta de Castilla y León no abona los pagos pendientes, que suman entre 120 y 130 millones de euros desde el pasado año.
Así lo ha advertido este lunes el portavoz de las empresas afectadas en León, Jesús González Llamazares, quien ha explicado que dichas compañías contratadas por la Administración autonómica llevan un año y algunos meses sin cobrar obras ejecutadas, por lo que su financiación se encuentra a "un límite extremo".
Al respecto, ha concretado que León aglutina a unas 45 empresas del sector afectadas, alrededor del 60 por ciento de las de la Comunidad, aunque el resto se encuentra en la misma situación. En la provincia leonesa hay entre 1.500 y 1.800 personas con empleos directos que podrían perder su trabajo si los pagos no se formalizan.
"Hemos intentado salvar la situación, pero estamos todos realmente mal", ha recalcado y ha apuntado que en estos momentos la labor que llevan a cabo las citadas compañías comprende labores de prevención y plantaciones, lo que requeriría la contratación de más personas, pero resulta inviable por la situación que atraviesan.
El último pago efectuado a las compañías por parte de la Junta se realizó en la primera quincena de octubre del pasado año y en diciembre de 2011 se abonaron pequeñas cantidades correspondientes a pagos retrasados.
REDUCIR LOS DESPIDOS
Ante esta situación, Jesús González Llamazares ha solicitado una respuesta al Gobierno autonómico para contar con una fecha de abono de la cantidad adeudada y elaborar un estudio de viabilidad para poder reducir el número de despidos. "Tendríamos una pequeña luz", ha subrayado.
Al mismo tiempo, ha precisado que las empresas afectadas han hecho frente hasta el momento a las nóminas de los trabajadores, pero a partir de ahora, tal y como está la situación, comenzarán los aplazamientos con la Seguridad Social, lo que conllevará al cierre y a la "muerte súbita" de las mismas.
Los representantes del sector efectuaron estas declaraciones a las puertas del Centro para la Defensa contra el Fuego, en León capital, donde este lunes el consejero de Fomento, Antonio Silván, ha presentado el balance de la campaña de incendios.
Al ser preguntado por esta cuestión, Silván ha trasladado a los empleados del sector la voluntad por parte de la Junta de llegar a un acuerdo con las empresas porque el operativo contra incendios realiza una labor "fundamental".
En este contexto, el consejero se ha mostrado convencido de que se solventarán los problemas derivados de la situación económica actual y ha lanzado un mensaje de tranquilidad a las empresas del sector.