VALLADOLID, 3 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Fundación Villalar-Castilla y León organizará en el primer trimestre de 2018 una exposición colectiva con los proyectos de creación artística becados en 2017, tal y como ha anunciado hoy la máxima responsable y presidenta de las Cortes, Silvia Clemente, tras reunirse con los beneficiados que a lo largo de este año están desarrollando un proyecto de creación artística contemporánea.
La Fundación Villalar-Castilla y León puso en marcha, el pasado año, unas becas pioneras, con una dotación de 108.000 euros (12.000 para cada una), destinadas a apoyar la creación artística contemporánea de la Comunidad.
En concreto, la obtención de una beca permitía desarrollar a lo largo de este año un proyecto de creación artística contemporánea en cualquiera de sus manifestaciones o modalidades: artes plásticas, artes escénicas, música, literatura, creación audiovisual y cualquier combinación de las mismas.
Durante el encuentro celebrado hoy, en el que han participado la presidenta de las Cortes y de la Fundación Villalar-Castilla y León, los miembros de la Comité Consultivo de la Fundación -nueve expertos en la actividad cultural, social, científica o artística de cada provincia de la Comunidad que asesoran a la Fundación- y los propios artistas becados, se ha analizado la marcha de los diversos proyectos desarrollados a lo largo de este año.
En la reunión se ha podido comprobar que todos los artistas han cumplido los objetivos previstos tanto en plazos como en la realización del proyecto y en la adecuación del mismo a su disciplina artística.
Como muestra de estos buenos resultados de los proyectos becados, la Fundación Villalar-Castilla y León organizará, en el primer trimestre de 2018, una exposición conjunta de todas estas propuestas culturales.
El objetivo, como ha señalado la presidenta durante el encuentro, es dar mayor visibilidad a estas creaciones dado que, como ha recordado Clemente, los proyectos becados son propiedad intelectual del artista, una circunstancia que no suele ocurrir en becas o ayudas de estas características.
Será una exposición en la además se utilizará el sistema de comisariado colegiado entre todos los miembros del Comité Consultivo de la Fundación, que serán también comisarios de la propia muestra.
ABIERTO EL PLAZO PARA LAS DE 2018
En la reunión celebrada hoy además se ha analizado la convocatoria de becas de la Fundación Villalar-Castilla y León para 2018, un proceso que sigue abierto durante este viernes 3 de noviembre.
Hasta el momento se han recibido un número similar de solicitudes que el pasado año aunque, como se ha puesto de manifiesto en reunión, sigue abierto el proceso y además se debe analizar si las solicitudes cumplen los requisitos o aportan la documentación solicitada. Para optar a estas becas se debe ser mayor de edad y residente en Castilla y León.
Para acceder a ellas, los interesados deberán presentar cumplimentado el modelo de solicitud que se encuentra en la página web de la Fundación: www.fundacionvillalarcyl.es Para otorgar las becas, el jurado tendrá en cuenta, además de los criterios del año pasado (trayectoria del solicitante, originalidad del proyecto, y su significación en el contexto de su disciplina) la vinculación del proyecto con el territorio.
LOS ELEGIDOS EN 2017
En la provincia de Ávila, la beca recayó, la pasada edición, en Juan Gil Segovia, por su proyecto titulado 'La arqueología del ser'. Se trata de un proyecto interdisciplinar que ha combinado, a través de los objetos y documentos que el artista José Antonio Arribas tenía en sus dos estudios, las prácticas artísticas contemporáneas con el concepto de archivo.
En Burgos, la beca recayó en Mayte Santamaría Saiz, por su proyecto 'Agosteros de sonidos empolvados'. El proyecto ha consistido en el registro de los sonidos que definen su provincia, como algunos se han perdido y deben ser recuperados para conseguir recordar las emociones.
Unos sonidos que se han recogido a través de recorrido por Burgos siguiendo una estructura temporal y espacial muy marcada, como una partitura musical.
En la provincia de León, la Fundación becó el proyecto 'Kintsugi.
Trabajos de desamor perdidos', de Yago Ferreiro Ruíz. Ha consistido en una investigación artística, por medio de la literatura, sobre el olvido y la pérdida articulada de la palabra.
En Palencia, la beca recayó en Javier Ayarza Arribas, por 'Geografía'. Con este proyecto el artista ha querido reflexionar relación/integración/dialéctica del mundo rural con respecto a una cultura urbana de carácter globalizador.
Todo ello a través de las fotografías, realizadas en las comarcas de Tierra de Campos y Cerrato, de las infraestructuras y artefactos que señalan la circulación tanto de personas (apeaderos de ferrocarril, paradas de autobús y taxis), como de información (expositores de información pública e institucional, servicio de correos, telefonía e internet).
La Fundación becó en Salamanca a Andrea Ruano Flores, por su proyecto titulado 'Piel y huesos'. El proyecto ha consistido en reflejar, a través de dibujos en diferentes formatos, cómo la vida de la artista cambió cuando, en Septiembre de 2007, los médicos la detectaron cáncer.
Además de la parte de la pintura, el proyecto ha consistido en la instalación de las obras y su fotografía.
En la provincia de Segovia se concedió la beca a Raquel Bartolomé Robledo, por su proyecto titulado 'Memoria del paisaje'. El proyecto ha consistido en la rehabilitación de una pequeña zona de cultivos hortícolas, en la Vega de Matabuena. Después de la limpieza ha sembrado lino que posteriormente ha usado para realizar trabajos creativos. Todo un proceso documentado con imágenes y con materias claves en cada etapa del proceso.
El Jurado, en Soria, escogió para la beca a Gloria Rubio Largo, por su proyecto titulado 'Vacíos del pasado'. Ha consistido en la realización de una intervención artística, a través de fotografías, vídeos o nuevos trabajos pictóricos, en espacios urbanos que están siendo abandonados. El proyecto ha concluido con una exposición fotográfica de la intervención.
En Valladolid, la persona a quien correspondió la beca la pasada edición fue Elisa Rodríguez González, por 'Mobiliario urbano'. El proyecto ha consistido en la colocación de una obra de un artista en una valla publicitaria de JCDecaux con el objetivo de reivindicar un espacio público cada vez más invadido de logotipos y eslóganes a través de la intervención artística.
El Jurado escogió en Zamora a Antonio Guerra Casquero, por 'Comporta-miento para un simulacro'. El proyecto ha consistido en la realización de 12/15 obras: fotografías, fotoesculturas e instalaciones con las que el artista ha pretendido invitar a cuestionar el paisaje como construcción ideológica y buscar un acercamiento a la naturaleza.