Foto: EUROPA PRESS
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BARCELONA, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -
El programa iniciado en 2013 que persigue instalar desfibriladores en las farmacias de Barcelona ya ha llegado a 180 boticas y ha permitido salvar la vida de dos personas que habían sufrido un infarto en la vía pública.
Lo ha explicado el cardiólogo del Hospital Clínic de Barcelona, Josep Brugada, en la conferencia inaugural del Congreso y Salón Europeo de Farmacia Infarma 2015, que se celebra en el recinto Gran Via de Fira de Barcelona desde este martes hasta el jueves.
Brugada es experto en muerte súbita y uno de los impulsores de la instalación de desfibriladores electrónicos inteligentes en las farmacias de Barcelona, unos aparatos que permiten remontar el ritmo cardíaco perdido en algunos casos, lo que contribuye a reducir las 4.000 muertes fulminantes que se producen cada año en Catalunya.
La iniciativa se inició en una primera fase piloto que abarcaba a cincuenya farmacias: "Ahora ya hemos pasado la fase dos y hemos llegado a 180, con el objetivo de alcanzar la fase tres, que ya las cubrirá a todas".
Ha destacado que más del 93% de los barceloneses cuenta con una farmacia a menos de 250 metros, con lo que "tener desfibriladores fácilmente identificables puede ayudar a salvar vidas", teniendo en cuenta que la muerte súbita puede presentarse en cualquier momento y lugar.
La iniciativa ha sido impulsada por la Associació Barcelona Salut y cuenta con el apoyo del Ayuntamiento de Barcelona, el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Barcelona (COFB) y el Sistema de Emergencias Médicas (SEM), y con la financiación de Laboratoris Ferrer y la Fundació AXA.
Antes de su implantación en Barcelona, el proyecto se inició en Girona, donde se han salvado 22 vidas gracias a los desfibriladores instalados en las farmacias.
MÁQUINA "QUE NO PUEDE PARAR"
Ha destacado que el corazón bombea cinco litros de sangre y late 70 veces cada minuto, "lo que le convierte en una maquina q no puede parar nunca", y ha destacado que el 40% de la mortalidad se debe a causas cardiovasculares.
Durante los tres días de Infarma, más de 220 ponentes de ámbito nacional e internacional participarán en una decena de mesas y más de sesenta aulas activas, en las que abordarán los nuevos servicios que ofrecen las farmacias al paciente de forma creciente, así como la actualidad y las perspectivas del sector.