LLEIDA 13 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Lleida instalará desfibriladores en las siete piscinas municipales e incorporará personal formado en maniobras de reanimación, según informó el consistorio. Los siete aparatos se suman al que el ayuntamiento incorporó en el Pabellón Municipal Barris Nord, según explicó hoy el concejal de Deportes, Txema Alonso.
"Con esta iniciativa el Ayuntamiento de una un salto de calidad más en el servicio al ciudadano usuario de las instalacions deportivas", dijo Alonso, que recordó que en los últimos años se han implantado a las piscinas la figura del mediador cultural y los elementos multilíngües de divulgación de las normas de uso saludable del recinto.
Los aparatos desfibriladores que ha adquirido el ayuntamiento para las instalacions deportivas municipales son "sencillos de usar y ágiles", según dijo Manel Piqué, delegado en Lleida del Consejo Catalán de Resuscitación y jefe de la unidad coronaria del Servicio de Cardiología del Hospital Arnau de Vilanova.
Piqué, que colabora con el Ayuntamiento en la expansión del uso del desfibriladores, explicó que "estos aparatos, junto con la formación, son importantes en la lucha contra la muerte repentina, la principal causa de mortalidad al mundo occidental".
El Ayuntamiento no es la primera institución de Lleida que impulsa la instalación de desfribiladores. El pasado 15 de mayo, el vicepresidente del Patronato de Promoción Económica de la Diputación de Lleida y primer teniente de alcalde del Ayuntamiento, Josep Presseguer, anunció que la corporación provincial llegaría a un acuerdo con una empresa instaladora para que todas las empresas interesadas tengan un descuento del 10% en la compra de estos aparatos y que la Diputación se haría cargo de la formación de los trabajadores y empresas interesadas tengan un descuento del 10% en la compra de aparatos.
Además, la Diputación se hará cargo de la formación de los trabajadores. Manel Piqué aseguró entonces que los cinco primeros minutos tras las paradas cardíacas son fundamentales para salvar la vida, tiempo en el que los servicios sanitarios no llegan al lugar donde está el enfermo. Según sus datos, unas 40.000 personas sufren al año paradas cardíacas en España, uno por mil de la población. Explicó también que estadísticas apuntan a que el número de personas que la sufren al año en Lleida es de entre 370 y 400.