BARCELONA 14 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Barcelona y la Taula d'Entitats del Tercer Sector de Catalunya han firmado este viernes un convenio con el que quieren captar 200 pisos vacíos de propietarios privados para destinarlos a alquiler social de personas vulnerables con un precio no superior a los 300 euros mensuales.
Tanto el alcalde de Barcelona, Xavier Trias, como la presidenta de la Taula del Tercer Sector, Àngels Guiteras, han subrayado la importancia del convenio, que tendrá una duración de cuatro años y un presupuesto total de 6,3 millones de euros, con una aportación municipal directa a la entidad de 5,6 millones.
El programa busca dar las máximas garantías a los propietarios, disponer de un parque de viviendas lo suficientemente importante para dar respuesta a la crisis y garantizar que las viviendas cumplan unas condiciones adecuadas para poder vivir.
El canon de cesión o contraprestación que recibirá el propietario será como máximo de 700 euros mensuales, y éste tendrá una garantía de cobro por parte de la administración durante la vigencia del contrato --tres años--, una financiación de obras de adecuación del piso, disposición de cobertura de riesgos y la devolución de la vivienda en buen estado cuando finalice el contrato.
Para la captación de los pisos, el Ayuntamiento y las entidades sociales pondrán en marcha una campaña de comunicación, y la información y solicitudes para acogerse se podrán pedir a través d la red de Oficinas de Vivienda de Barcelona.
La Taula del Tercer Sector creó a finales de octubre la Fundación Hàbitat 3, que será la encargada del seguimiento los pisos, y que es un nuevo instrumento que, según Guiteras, supone un "salto de escala" de entidades, que se irá desplegando con más proyectos y acuerdos.
Trias ha celebrado que el tercer sector asuma el seguimiento de los pisos del programa porque fortalecerá al sector, y Guiteras ha remarcado que permitirá crear puestos de trabajo a unas 300 personas en riesgo de exclusión, como en los trabajos de rehabilitación de pisos.
Guiteras ha asegurado que un millar de barceloneses podrán beneficiarse de este programa en los próximos cuatro años, y ha remarcado que "sin vivienda, no hay inclusión social".
Ha asegurado que el parque de alquiler social continúa siendo insuficiente --lo ha situado en el 2% del total cuando la media europea es del 14%--, y que este programa suponen "200 gotas en un océano".
"30 AÑOS TARDE"
Tras el pleno extraordinario sobre desahucios del jueves --en el que Trias asistió pero no intervino--, el alcalde ha admitido que se llega "30 años tarde" en políticas de vivienda pública y ha abogado por un cambio de filosofía con medidas a medio y largo plazo.
Ha criticado que en el pleno se hizo un "pim pam pum" y que lo que interesa a los ciudadanos es qué se hace en el futuro, abogando por un cambio de mentalidad como se hizo en otros ámbitos como la salud o la educación con políticas a diez, quince o veinte años vista.
Ha sostenido que si se mantiene una misma política a medio plazo se consigue ser un referente, y que ahora Barcelona "no es un referente en vivienda pública".
La teniente de alcalde de Igualdad, Calidad de Vida y Deportes, Maite Fandos, ha subrayado el aumento de pisos de alquiler social desde el inicio de la legislatura --de 1.140 a 2.248--.
Los técnicos municipales ya han inspeccionado esta semana 100 de las 398 viviendas potencialmente vacías en tres barrios de Barcelona, y cuya inspección se completará antes de fin de año.