Cree si se pone en cuestión la inmersión lingüística, el aranés saldrá más perjudicado
LLEIDA, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -
El senador socialista por Lleida y exsíndic de Aran, Francés Boya, ha asegurado este martes que el ministro de Educación, José Ignacio Wert, "es el exponente de un Gobierno intolerante y casposo" por su ataque al aranés y al catalán y le ha invitado a la Val d'Aran para que entienda la inmersión lingüística.
Boya considera que si se pone en cuestión la inmersión lingüística el aranés saldrá mucho más perjudicado porque es una lengua que está todavía en una situación más débil que el catalán.
"Nosotros en este momento tenemos una situación de una debilidad extrema desde el punto de vista del uso social de la lengua", ha remarcado en declaraciones a Europa Press el exsíndic aranés.
Lo que en su opinión mantiene básicamente la lengua con algunas perspectivas es el trabajo que se hace en la escuela: "El trabajo de la escuela es el último escalón para que la lengua no desaparezca", ha dicho, agregando que le parece un sinsentido poner en cuestión una política lingüística que ha sido de éxito y de consenso.
Boya ha insistido en que está convencido de que este ministro y este Gobierno no saben dónde van con estos temas: "Lo que están haciendo es lanzar un mensaje en contra de la convivencia y un espíritu que nos ha hecho funcionar durante 30 años de una forma modélica y especialmente en la Val d'Aran".
INVITACIÓN A LA VAL D'ARAN
En este contexto, Boya cree que sería bueno invitar al ministro Wert a la Val d'Aran para que entendiera y comprendiera que el uso indistinto de las lenguas, "de una forma lógicamente sensata en la educación, es absolutamente enriquecedor y permite el aprendizaje de las lenguas siguientes, las extranjeras con muchísima más facilidad".
"Invito al ministro a que venga a la Val d'Aran para entender y comprender como el uso progresivo y el conocimiento progresivo de las lenguas es una forma de integración", ha declarado.
Boya sostiene que la Val ha tenido unos altos índices de inmigración, en algunos lugares del 29% en los que la gente se ha integrado gracias al modelo que ha funcionado durante todos estos años.