CAMBRILS (TARRAGONA), 20 (EUROPA PRESS)
Un camión de Secomsa, empresa que se encarga de la gestión de residuos en la comarca del Baix Camp (Tarragona), ha destruido esta mañana en Cambrils más de 2.200 objetos (bolsos, gafas de sol y gorras, entre otros), 240 DVDs y 380 CDs piratas procedentes del 'top manta' y decomisados por la Policía Local, que ha detectado un fuerte incremento de vendedores ilegales en los primeros meses del verano.
Esta operación habitual, que se repite periódicamente dentro de una filosofía de fuerte presión policial, ha despertado hoy una gran expectación por la polémica surgida en torno a la falta de medios contra la venta ambulante ilegal. En 2010 se han destruido casi 6.400 objetos, están pendientes de resolución judicial otros 1.500, y quedan por analizar 300 más
El pasado año, sólo en esta localidad costera los agentes de la autoridad aprehendieron a los manteros cerca de 14.500 objetos en 141 intervenciones.
Al igual que otros alcaldes de los pueblos más turísticos de la costa tarraconense como El Vendrell o Calafell, invadidos estos meses por los 'manteros', Joan Mas --que sustituye en Cambrils a Robert Benaiges durante las vacaciones--, ha confirmado las dificultades de los Ayuntamientos para erradicar un fenómeno de tanta envergadura y el enorme coste económico (más de 200.000 euros anuales) y humano (el 25% de la plantilla se dedica a controlar a los 'manteros').
Cambrils, una de las pocas localidades donde se sanciona al comprador de mercancía falsificada, concretamente con 300 euros, también ha realizado un informe sobre el 'top manta' que enviará a la Generalitat y al Ministerio del Interior.
En él se detalla el modo de suministro y organización de los 'manteros', que pueden llegar a vender al mes más de 4.000 euros, unos 140 euros diarios de media. La Policía de Cambrils también ha detectado comportamientos cada vez más agresivos.
Al igual que en Salou, la acción represiva de la Policía se acompaña con una campaña informativa para concienciar a los consumidores del grave daño que ocasiona el 'top manta' al tejido comercial.
La decisión de municipios como El Vendrell o Calafell, que han decidido rebajar la presión policial en zonas concretas más alejadas de los ejes turísticos y comerciales, no está exenta de efectos secundarios.
En Calafell, la gestión de este conflicto ha causado un fuerte roce interno en el equipo de gobierno. El alcalde, Jordi Sánchez (PSC), ha criticado la "deslealtad institucional" de Manel Romero (Agrupació Democràtica Municipal de Calafell), coordinador del Ayuntamiento, por desmarcarse de la posición oficial del consistorio y respaldar las quejas de los comerciantes por la laxitud en el control de los 'manteros'.
Incluso una decena de comerciantes de Segur de Calafell, en un gesto de protesta, decidieron instalar sus mantas junto a la plaza del Mil.lenari, la zona escogida para el asentamiento de los 'manteros' y hacer la competencia en la calle a los vendedores ilegales.