BARCELONA 2 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Distrito de Ciutat Vella de Barcelona considera que los 23 equipamientos asistenciales que concentra el barrio del Raval provoca "un efecto llamada" entre las poblaciones más vulnerables de toda la ciudad, y pide un reequilibrio con el resto del municipio.
Se trata de una de las líneas de actuación que expone la concejal del distrito, Itzíar González, en el informe de 85 páginas sobre el presente y el futuro de la gestión en el Raval que presentó hoy en el pleno, durante el cual los grupos tuvieron un corto debate sin profundizar en los puntos del análisis.
En el informe, la concejal admite que el Raval se caracterizaba en el pasado por los vecinos en riesgo de exclusión social. "Pese a que aún queda mucho trabajo por hacer, las realidades sociales han cambiado en las últimas décadas", defiende.
El debate se quedó en un intercambio de reproches entre los grupos de CiU y PP y el Gobierno municipal, que defendió su gestión. La edil aseguró que, pese a los problemas "que atentan contra la dignidad del Raval", el Consistorio tiene "la musculatura necesaria" para reconducirlos.
CiU y PP: INFORME "OPORTUNISTA"
Mercè Homs (CiU) acusó al bipartito de hacer un informe "oportunista y desafortunado", criticó que no se refiera al incivismo y reclamó priorizar el barrio como un lugar para vivir y no para los turistas. Alberto Fernández Díaz (PP) consideró que González lo presentó por "la indignación de los barceloneses" ante la gestión del barrio, y advirtió de que no responde a los problemas.
El republicano Ricard Martínez pidió dejar de estigmatizar el Raval. Admitió que en los últimos años el Ayuntamiento se ha esforzado para que la gente quiera vivir en el barrio, pero lamentó que no lo pone fácil, ya que el ambulatorio está saturado y encontrar plaza en la escuela pública es muy difícil.
El primer teniente de alcalde de Bienestar, Carles Martí (PSC), aseguró que siempre han afrontado los problemas derivados del turismo, inmigración, droga, prostitución y convivencia, y consideró que "no tiene sentido magnificarlos ni instrumentalizarlos". Ricard Gomà (ICV-EUiA) apoyó el informe sobre un barrio cuyos vecinos "expresan dignidad y satisfacción" de vivir en él.
La concejal de Ciutat Vella consideró oportunistas los reproches, y añadió que la Junta Local de Seguridad del distrito creada en junio funciona contra la inseguridad. El alcalde, Jordi Hereu, concluyó que el Ayuntamiento afronta todos los fenómenos que no gustan.