BARCELONA 1 Jul. (EUROPA PRESS) -
La entidad ecologista Depana fotografió la última semana de mayo y las tres primeras de junio a los cachorros de la osa 'Hvala' de la Val d'Aran cerca de una localización turística, en el marco del seguimiento que realiza de los osos del Pirineo.
El experto en oso bruno y el fotógrafo profesional Oriol Alemany localizaron a dos osos subadultos, uno rubio y otro marrón grisáceo, de sexo todavía por determinar.
Con toda probabilidad se trata de los osos 'Nhèu' y 'Noisette', hijos de la osa 'Hvala', que nacieron en las montañas de Bossòst en enero de 2009 y, como es normal en la especie, esta primavera se han emancipado de su madre, una vez ésta entró en celo en mayo.
Según los expertos, los dos hermanos permanecerán juntos un año más aproximadamente, hasta su separación definitiva. La confirmación definitiva de la identidad de los osos se conocerá cuando salgan a la luz los resultados de AND de los rastros recogidos por los guardas del Conselh Generau d'Aran, a quien Depana mantiene informado en todo momento de los movimientos de los osos.
Las fotografías fueron registradas cerca de un lugar de fuerte afluencia turística de la Val d'Aran, y para evitar interferir en una época sensible de su ciclo vital, en plena independización de su madre, no se han hecho públicas hasta que han abandonado el paraje.
En este tiempo los osos han estado comiendo hierba y plantas tiernas como es habitual en esta estación. De hecho, el 75% de su dieta es de origen vegetal. También se ha observado a los osos esporádicamente haciendo agujeros para buscar insectos, básicamente hormigas, para alimentarse.
El seguimiento se realizó a una distancia suficiente con prismáticos y telescopios, y las imágenes se obtuvieron con un potente teleobjetivo con la finalidad de no molestar a los animales, que se han movido a unos entre 1.600 y 2.000 de altura en una zona que alterna prados y bosques.
La osa 'Hvala' fue reintroducida en el Pirineo en 2006, y cobró notoriedad tras atacar levemente a un cazador. Entidades ecologistas aseguraron entonces que el ataque se produjo porque ésta se vio acosada en una batida de caza, y recordaron que se trataba de la primera agresión conocida de una osa a una persona desde el inicio del programa de reintroducción.
El Departamento de Medio Ambiente del Conselh Generau d'Aran calcula que existen entre tres y cuatro plantígrados como población estable en la Val d'Aran --si bien los animales entran y salen periódicamente de Francia.