BARCELONA 16 Feb. (EUROPA PRESS) -
El edificio de las Drassanes Reials, sede del museo marítimo de Barcelona, se ha inaugurado oficialmente este sábado, tras unas obras de restauración que se iniciaron en el 1986, a cargo de los arquitectos Esteve y Robert Terradas, y que han supuesto una inversión de 30 millones.
Según el arquitecto Robert Terradas, la restauración ha supuesto una inversión de 17 millones de euros en ésta última fase de las obras, desde 2010, en la que se ha recuperado toda la fachada marítima y el tejado de la nave.
El arquitecto ha explicado que la restauración perseguía el objetivo de "rehabilitar el edificio para que las generaciones futuras lo puedan disfrutar durante 150 años y prepararlo para alojar un nuevo museo marítimo a finales de 2014".
En esta obra en la que la ciudad "recupera un monumento de estilo gótico único en el Mediterraneo" según el director del museo, Roger Marcet, se ha rehabilitado toda la fachada marítima, dotado el tejado de una compleja estructura de vigas y se ha climatizado e iluminado el espacio para preservar los barcos que alojará el museo.
Durante la rehabilitación de los subsuelos, se descubrió que hubo un edificio previo al actual, unos metros más avanzado hacia el mar, también se encontró una grada de una galera del siglo XVII y una necrópolis romana que data entre el siglo I y VI, de la cual se muestra una parte al público en un musuleo en las Drassanes.
La obra, que data de un proyecto de restauración de las Drassanes Reials de Barcelona del 1986, ha sido coordinada por el propio museo y financiada por la Diputación y Ayuntamiento de Barcelona y el Ministerio de Fomento.
PUERTAS ABIERTAS
Con motivo de la inauguración, este sábado se inicia una jornada de puertas abiertas en las Drassanes, que tras tres años de obras, abren sus puertas al público durante todo el fin de semana para mostrar las remodelaciones y los diferentes hallazgos de ésta última fase de restauración.
Los ciudadanos podrán acceder a los pabellones centrales, conocidos como --les Grans Naus--, más de 9.000 metros cuadrados vacíos, que alojarán la exposición del museo a finales del 2014, y podrán ver los hallazgos arqueológicos y el muro de cierre de la Drassana del siglo XIII.
Al coincidir con la fiesta de Santa Eulàlia, copatrona de la ciudad, se abrirá el portal de Santa Madrona, única puerta de entrada y salida a la antigua ciudad medieval, también se abrirán los jardines de Baluard, cerrados al público por motivos de seguridad.
El sábado se iluminará la muralla medieval que da al Paral·lel, el portal de Santa Madrona y la casa del gobernador; y el domingo, bandas musicales llegarán a las Drassanas tras recorrer diferentes calles del centro.