Cuenta con 803 objetos y un escenario para que el público interprete sus canciones favoritas
BARCELONA, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
La exposición 'Serrat: 50 años de canciones' homenajea la trayectoria del músico catalán Joan Manuel Serrat a través de 803 objetos que recuerdan y profundizan en sus diferentes facetas personales y artísticas.
Podrá verse en el Arts Santa Mònica desde este martes y hasta el 13 de septiembre y posteriormente visitará Madrid y otras ciudades de España y Latinoamérica.
La muestra expone su primera guitarra, toda la discografía oficial en los diferentes formatos, así como portadas inéditas de diferentes países, pero también elementos de su entorno íntimo, como un taburete Bocaccio o camisetas del Barça, han explicado este martes en rueda de prensa los comisarios Miquel Jurado, Lluís Marrasé y Fermí Puig.
A través de auriculares, los visitantes podrán acceder a 200 elementos sonoros que incluyen canciones, declaraciones o anécdotas, como el recital que celebró en un avión porque Augusto Pinochet no dejó que bajara.
El cantautor ha seleccionado personalmente letras originales y partituras manuscritas que pueden verse, acompañadas de 250 fotografías, 40 carteles y otros materiales curiosos, como ropa de Serrat utilizada en sus conciertos.
La muestra organiza también un ciclo de conciertos y pone a disposición de los visitantes un escenario donde, los sábados, las personas que quieran podrán interpretar temas de Serrat, que ha asegurado que irá a verlo en alguna ocasión.
PRIMERA APARICIÓN PÚBLICA
El 18 de febrero de 1965, el joven de 21 años del barrio del Poble Sec de Barcelona hizo su primera aparición pública: un concierto radiofónico en el estudio Toresky de Radio Barcelona, en el programa 'Radioscope' de Salvador Escamilla, a quien Serrat ha agradecido su empuje: "Mi impulso inicial tiene su nombre y su sello", se ha sincerado el artista.
El cantante se ha mostrado muy agradecido por "el afecto y el reconocimiento de esta recopilación" y por el apoyo que ha recibido durante estos 50 años de trabajo, que no habrían sido posibles sin personas como Quico Sabaté, Francesc Borrull, Ricard Miralles y otros artistas y personalidades con los que ha compartido el camino.
Serrat ha recordado que la iglesia que era antes el Arts Santa Mònica fue donde fue bautizado y donde, posteriormente, se declaró agnóstico ante el mismo cura: "No fue tanto un acto de fe, sino que quería casarme por lo civil y tenía que hacer esta maniobra... Cosas del régimen y de sus consecuencias", ha explicado.
"Es un icono presente en la memoria sentimental y cultural del país. Con sus canciones hemos crecido, hemos cantado, nos hemos declarado, hemos conocido poetas y nos hemos dado a conocer en otros países", lo ha halagado el conseller de Cultura de la Generalitat, Ferran Mascarell.
Los comisarios lo han descrito como "el mejor embajador de la canción catalana alrededor del mundo", y lo han reconocido como una figura que ha explicado la vida, con sus pros y sus contras, a varias generaciones, a través de su poesía y su música, pero también con su actitud humana, de compromiso.
La muestra está compuesta por material que guardó el artista, "porque soy catalán y los catalanes lo guardamos todo" --ha bromeado--, así como elementos coleccionados por el comisario Puig y el particular Eduard Martí.