BARCELONA 21 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Museu Blau de Barcelona --antiguo Museu de Ciències Naturals-- abrirá totalmente renovado en su nueva sede, el edificio Fòrum, a finales de marzo, según ha confirmado en una entrevista a Europa Press su directora, Anna Omedes.
El nuevo espacio, ubicado en el triangular edidicio de Herzog & De Meuron, tendrá de 5.000 metros cuadrados de espacio expositivo. Sustituye al Castell dels Tres Dragons, el edificio modernista del parque de la Ciutadella, que ahorá pasará a ser la sede científica, aunque más adelante se prevé que puedan hacerse visitas guiadas.
El nuevo Museu Blau estará dotado con las últimas tecnologías, y en un primer ámbito recorrerá la historia de la Tierra en base a la teoría de Gaia. Después, se explicará aspectos concretos de la Tierra hoy, en base a las colecciones del museo.
"No tenemos que renunciar a lo que somos, un museo de ciencias naturales con patrimonio", ha comentado Omedes, en referencia a la multitud de animales disecados, que no desaparecerán, sino que se incorporarán junto con miles de minerales y la novedad más importante, las plantas.
Y es que el museo será uno de los pioneros en dar un peso importante a las plantas, algas, hongos y microbios --"la parte más importante de la vida en la Tierra"--. Para ello, habrá un lago rodeado de vegetación donde se realizarán talleres de botánica y microbiología con microscopios.
El museo contará con 900 metros cuadrados para exposiciones temporales, y tendrá un vestíbulo de 1.000 metros de acceso gratuito donde además de una tienda y servicio de restauración, se realizarán intervenciones artísticas.
Presidiendo la entrada estará colgado del techo el esqueleto de la ballena, una de las piezas estrellas del museo. Se trata de un rocual localizado en las costas de Girona en 1862. Durante la mudanza se rompió en pedazos, y tras ser restaurada por partes en Barcelona viajará a Sevilla para ser reconstruida.
El nuevo Museu Blau no solapará sus contenidos con el otro museo de ciencias de Barcelona, el Cosmocaixa. De hecho, sus responsables colaboran habitualmente y se firmará un convenio para que haya entradas combinadas.
El futuro Zoo Marino, que se ubicará en una plataforma ganada al mar junto al Fòrum, también estará vinculado con el Museu Blau, que dedicará una de las casetas exteriores a informar del nuevo zoológico. De momento las obras están paralizadas por el plan de austeridad del Ayuntamiento y no hay fecha de apertura.
La directora ha confiado en superar ampliamente los 170.000 visitantes que pasan por el antiguo Museu de Ciències Naturals en un año.
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