BARCELONA 17 Dic. (EUROPA PRESS) -
Núria de Gispert i Català, reelegida este lunes presidenta del Parlament en el primer pleno de la X Legislatura catalana tras ocupar ya el cargo en 2010-12, no es sólo pionera por ser la primera mujer como segunda autoridad de Catalunya.
Nacida en Barcelona en el año 1949, Núria de Gispert también fue la primera consellera que tuvo UDC y la segunda que tuvo el Govern de la Generalitat tras la convergente Maria Eugènia Cuenca.
Es conocida por su talante dialogante: en el último tramo del gobierno de Jordi Pujol (1999-2003), en plena controversia sobre el sucesor de CiU como candidato a la Generalitat, ella (UDC) y Xavier Trias (CDC) fueron los puentes entre CDC y UDC en la carrera que mantuvieron los líderes convergente y democristiano, Artur Mas y Josep Antoni Duran.
HIJA DE CONSELLER
Es hija del político y abogado Ignasi de Gispert i Jordà, que fue conseller de Justicia en el primer gobierno de Jordi Pujol, entre 1980 y 1982, responsabilidad que años después ocupó la hija: de 1995 a 2001, y luego de 2002 a 2003, cuando asumió un 'macrodepartamento' que también englobaba Interior.
De Gispert es descendiente de la benefactora Dorotea de Chopitea (1816-91), está casada, tiene cuatro hijos y es licenciada en Derecho por la Universidad de Barcelona (UB), tras lo cual ejerció la abogacía, y en 1986 empezó a militar en Unió.
En este partido ha sido miembro ya histórico de la dirección, y, además de ser consellera, ocupó antes cargos de responsabilidad en los gobiernos de Pujol, como la Secretaría General de Justicia y Gobernación (1984-1993) y la Vicepresidencia del Comité Director para la Organización de la Administración de la Generalitat (1993-94).
CONSELLERA
En 1995 saltó a la primera línea de la política como titular de Justicia, en sustitución de Antoni Isac, cargo que mantuvo en los siguientes gobiernos de Pujol, con una excepción: cuando tomó el relevo de Josep Antoni Duran al frente de Gobernación y Relaciones Institucionales, después de que este dimitiera.
Cuando estuvo al frente de Justicia trabajó en la mejora de los equipamientos judiciales, la consolidación de un modelo catalán de justicia juvenil y de los servicios penitenciarios, e impulsó la primera ley de parejas de hecho del Estado.
Tuvo que lidiar con sus adversarios políticos cuando, como titular de Justicia e Interior, hubo polémica sobre la concesión del tercer grado al financiero Javier de la Rosa, que había sido condenado a 20 meses de cárcel acusado de intentar estafar al Grupo Kio en 1992.