Rusia es el país con difteria más cercano a España y de donde podría proceder quien le ha contagiado
BARCELONA, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los padres del niño de 6 años de Olot (Girona) ingresado en estado grave en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona por un caso de difteria habían rechazado vacunarlo.
"La vacuna está incluida en el calendario sistemático y se recomienda de forma generalizada porque es muy efectiva", ha explicado a Europa Press el epidemiólogo del Hospital Clínic de Barcelona, Antoni Trilla, que ha destacado que la decisión de aplicar la vacuna recae en los padres.
Ha destacado que cerca de un 10% de la población catalana no está correctamente vacunada, "bien sea por alergia, por pautas incompletas o por decisión propia", como el caso del pequeño afectado, que al no estar protegido contra la bacteria se ha contagiado con facilidad.
"La vacunación va muy bien y protege hasta la edad adulta", ha concretado, por lo que se recomienda dosis de recuerdo cada diez años a partir de los 18, una pauta que se había ido descuidando porque la enfermedad se creía erradicada.
Este hecho "podría hacer que algún adulto que haya estado en contacto con el niño se haya contagiado", por lo que Trilla ha recomendado a cualquier persona que pueda sospecharlo que lo comunique a las autoridades sanitarias.
En España no se detectaba ningún caso de difteria desde 1987, "y es una bacteria que circula poco por los países del entorno español, siendo Rusia el más cercano" y de donde parece que podría proceder el sujeto que habría contagiado al niño.
CASOS AISLADOS
"Es posible que alguien más se haya contagiado, aunque seguramente no se va a propagar porque serán casos aislados", ha manifestado Trilla, que también ha aprovechado para animar a los ciudadanos a vacunarse periódicamente según las pautas establecidas.
La difteria es una enfermedad infecciosa producida por la bacteria 'corynebacterium diphtheriae', especialmente agresiva con menores de cinco años y ancianos, y se transmite a través de las vías respiratorias, principalmente por tos y estornudos.
La enfermedad inflama las vías aéreas altas --fosas nasales, amígdalas, faringe y laringe--, lo que desencadena en dificultades respiratorias, que se suman a otros síntomas, como fiebre, dolor de cabeza e inflamación de los órganos genitales y las conjuntivas.
Además, puede presentar la formación de una membrana que se sitúa en la faringe y que sangra con facilidad, así como complicaciones cardíacas y renales.
"Cuando la bacteria entra en el cuerpo y se desarrolla, actúa como un veneno, que intoxica al afectado", ha concretado Trilla, que ha destacado que al pequeño se le está administrando un tratamiento antídoto que ha llegado de Francia.
SÍNTOMAS EL 25 DE MAYO
El niño llegó el jueves a Urgencias del Hospital de Olot, aunque los síntomas habían empezado el 25 de mayo --tenía cefalea, fiebre y dificultades para tragar--, y no hasta el viernes que le hicieron pruebas específicas: los resultados confirmaron que estaba afectado por la bacteria de la difteria*.
El sábado, el niño fue trasladado a la UCI pediátrica del Vall d'Hebron, donde este martes sigue ingresado en estado grave, intubado y con ventilación asistida, a la espera de su respuesta al tratamiento.
Asimismo, se están localizando a todas las personas que han estado en contacto con el niño y proporcionando las medidas de profilaxis y vacunaciones indicadas.