BARCELONA 9 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía pide 4 años de cárcel para un vigilante del Metro de Barcelona que presuntamente pegó a un hombre que no quería apagar su cigarrillo en la estación de Urquinaona.
Según el escrito de acusación, la noche del 10 de junio de 2004 el acusado Javier S.F. --que había sido condenado en dos ocasiones por delitos de lesiones, la última un mes antes de los hechos, y trabajaba para la empresa Vinsa--, se acercó a la víctima y le pidió que apagara el cigarrillo que se estaba fumando.
Al negarse, el vigilante sacó su defensa, le golpeó en un costado y le empujó, haciéndole caer al suelo.
Después siguió pegándole patadas y le pisó el tobillo, provocándole diversas contusiones y un esguince en el tobillo y en un ligamento, además de romperle el reloj y una prótesis dental.
El Fiscal pide para Javier S.F., que será juzgado el jueves, cuatro años de cárcel y una indemnización para la víctima de 2.100 euros, de la que responderán subsidiariamente la empresa Vinsa y TMB.