Despliegan el Plan Grèvol para garantizar la seguridad durante las fiestas
BARCELONA, 17 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los Mossos d'Esquadra han desplegado su plan operativo para las fiestas navideñas de este año que supone un refuerzo del patrullaje a pie y de uniforme en ejes comerciales y zonas de gran afluencia como los mercados navideños, y en el que por primera vez Barcelona ha blindado La Rambla, la Sagrada Família y la Catedral.
Se trata de la primera Navidad después de los atentados en La Rambla barcelonesa del mes de agosto y en Cambrils (Tarragona), y la principal novedad, acordada en el marco de la Junta Local de Seguridad, ha sido la colocación de bolardos reforzados en esta arteria barcelonesa, la peatonalización del entorno de la Sagrada Família y la colocación de grandes jardineras que impiden el acceso a la avenida de la Catedral, donde está el mercado navideño de Santa Llúcia.
El portavoz de los Mossos d'Esquadra, Albert Oliva, ha explicado que en temas de seguridad, la "gran diferencia que verá la gente en la calle" este año son estas medidas protectoras complementarias, además de que se mantendrán los vehículos policiales apostados en puntos de interés.
La presencia de policía en las calles se ha incrementado entre un 5% y un 10% desde el mes de septiembre, después del atentado, tras el compromiso adquirido por el entonces conseller de Interior Joaquim Forn, y ahora estas fuerzas policiales se dirigen a puntos específicos vinculados con las fiestas navideñas.
Precisamente, los Mossos prestarán atención durante estas fiestas --con especial hincapié en los días previos de compras-- en los ejes comerciales del centro de la ciudad, las grandes superficies, los polígonos y los mercadillos navideños.
También refuerzan su presencia en los principales ejes viarios y en las áreas de servicio, para proteger a los camiones de transporte, así como garantizar la seguridad de los desplazamientos, que aumentan en estas fechas.
El Plan operativo específico (POE) Grèvol --que ya cuenta con siete años de historia-- de los Mossos también prevé la vigilancia de las zonas de ocio nocturno, con dispositivos específicos en las fiestas de fin de año, y en la movilidad, con controles de tráfico (el año pasado se hicieron 32.000), así como la vigilancia del transporte público.
ALERTA PLAN ANTITERRORISTA
Respecto al nivel 4 sobre 5 de la alerta terrorista, Albert Oliva ha explicado que los dispositivos de seguridad y los patrullajes se modularán en función de "las circunstancias concretas".
Así, si reciben alguna alerta o amenaza concreta fiables pueden modular o adecuar la presencia policial y las medidas de seguridad, por lo que advierte de que en el caso de tener una información relevante sobre un lugar concreto, se destinaría allí a más patrullas.
El patrullaje lo realizarán los Mossos y las policías locales, y se prevé repetir la experiencia de las patrullas mixtas con estos cuerpos, especialmente en Barcelona, donde ya se han realizado en años anteriores con la Guardia Urbana.
HURTOS
Más allá de la alerta terrorista, los Mossos se centran muy especialmente en la prevención de los hurtos en estas fechas, un delito que en la Navidad pasada se incrementó un 10%.
"Hay más gente en la calle, comprando, más dinero y también más despiste", ha evaluado Oliva, que destaca que por este motivo también se refuerza el patrullaje en los medios de transporte, especialmente el Metro.
El portavoz policial recuerda algunos de los consejos cuando se va de compras o se pasea por zonas concurridas: vigilar el bolso, llevarlo cruzado, ponerse delante la mochila y cuidar las pertenencias mientras se miran los escaparates y se hacen compras.
FASES
El plan se puso en marcha la segunda semana de noviembre con una primera fase de presentación de la campaña a los colectivos afectados, y ha entrado en su segunda fase, la prenavideña, en que se hace especial énfasis en la protección de los ejes comerciales.
Posteriormente, la atención se centra en el Fin de Año y la Cabalgata de Reyes, concentraciones multitudinarias en las que se prevé un dispositivo específico en el que se impedirá el tráfico rodado en los aledaños.
En concreto, en la fiesta de Fin de Año en las Torres Venecianas de plaza de España, donde se prevén entre 65.000 y 75.000 asistentes, se vigilará la entrada de objetos contundentes, botellas y vasos de cristal, y se cerrarán las vías adyacentes.
Por la Cabalgata, como el año pasado, la previsión es que se pueda volver a restringir la circulación de camiones en la zona céntrica de la capital catalana.