Las universidades públicas catalanas pierden el equivalente al 23% de profesores en cinco años
BARCELONA, 27 Sep. (EUROPA PRESS) -
La retribución del profesorado universitario catalán se sitúa "a niveles de los años 80" si no se tiene en cuenta la inflación, según el informe 'El professorat universitari a Catalunya' del Observatori Sistema Universitari (OSU), presentado este martes y que describe las plantillas del personal docente e investigador (PDI) de las universidades públicas entre los cursos 2004/2005 y 2014/2015, en las que han detectado un aumento de la temporalidad.
Un catedrático de universidad cobraba en 1988 entre 25.000 y 30.000 euros de media, cifra que aumentó en 1991 con la reforma retributiva al alza hasta 40.000 euros --35.000 en euros constantes de 1988-- y que se sitúa en 2015 en cerca de 80.000 euros --lo que equivale a unos 30.000 euros de 1988--, siguiendo una tendencia similar los titulares de universidad y los titulares de escuelas universitarias.
Una de las autoras del estudio y profesora de Matemáticas de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC) Vera Sacristán ha asegurado que si se descontara la inflación las retribuciones estarían a niveles anteriores al aumento de 1991.
Otro de los aspectos que recoge el estudio es el descenso en las plantillas de personal docente e investigador (PDI) a partir de 2010, en el que, en términos de personas equivalentes a tiempo completo, se ha producido un descenso del 23% en cinco años.
El informe alerta que el grueso de las plantillas ya no está constituido por profesorado funcionario, que pasa del 52% del PDI al 37% en la década estudiada --reduciéndose sobre todo en las de la primera fase de la carrera laboral como lector--, y que mientras que en el curso 2004/2005 el 54% de la plantilla era estable, en el 2014/2015 se ha reducido al 49%, por lo que se supera el máximo del 40% permitido para PDI temporal.
Sacristán ha señalado que la sustitución de profesorado funcionario por agregado no se está dando y que, antes de las limitaciones de la tasa de reposición, ésta ya era lenta por motivos económicos y por la "lentitud" de la cobertura de plazas con el plan Serra Hunter.
"PRECARIEDAD PROGRESIVA"
La autora del estudio y profesora de Economía de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) Paula Veciana ha remarcado que se da una "precarización progresiva" por la disminución de efectivos y la mayor temporalidad, en una tendencia que se aprecia de forma similar en todas las universidades públicas catalanas.
El estudio de OSU también señala que la proporción de contratos a tiempo parcial ha crecido del 35% al 47% en ese periodo y, según ha explicado el colaborador del estudio y profesor de Economía de la Universitat de Barcelona (UB) Alfonso Herranz se hace un "uso inadecuado" de la figura del profesor asociado y el profesor visitante para cubrir necesidades docentes.
Ha alertado de una reducción de las incorporaciones de personal predoctoral y postdoctoral, señalando que los contratos de ayudantes son "casi testimoniales" y las ayudas predoctorales han ido disminuyendo, de la misma forma que lo ha hecho el crecimiento del profesorado lector y la contratación de jóvenes investigadores por la vía de convocatorias estatales o autonómicas.
"DETERIORO" CALIDAD INVESTIGADORA
Ha afirmado que pese a la precariedad detectada del PDI no se ha percibido un "deterioro" de la calidad investigadora, pero ha alertado de las consecuencias de no incorporar a personal joven o hacerlo en malas condiciones.
En el curso 2014-2015, el 46% de la plantilla tenía una edad de 50 años o más, mientras que el menor de 30 años suponía el 2,5%, cuando una década antes era del 5%.