BARCELONA 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
Profesores, familias y expertos ven "injusta" la gratuidad total del comedor escolar de los alumnos que residen en municipios diferentes al del colegio, según una de las conclusiones del estudio 'La mejora de los comedores escolares y el tiempo del mediodía en los centros escolares' de la Fundació Catalana de l'Esplai.
En las conclusiones del estudio, que se ha realizado con entrevistas en profundidad a 25 personas relevantes del sector de la educación, se aborda el asunto de la gratuidad de los 'desplazados obligatorios', donde hay un consenso en que sería necesario reconsiderar el asunto.
"No parece demasiado coherente ni justo que se tenga que pagar la comida a las familias que pueden pagárselo", dice el estudio cuestionando la gratuidad de este servicio.
Según las opiniones del sector, esta observación se hace aún más relevante "teniendo en cuenta el contexto de crisis, de reducción de los presupuestos públicos y de la creciente demanda de becas y ayudas para situaciones de necesidad".
Ante la gratuidad de comedor y transporte de la que gozan los alumnos que residen en otros municipios --ya que no pueden ir a casa a comer--, el informe propone replantear su carácter universal.
En rueda de prensa, la gerente de los programas escolares de la Fundació Catalana de l'Esplai, Cristina Rodríguez, ha dicho que al menos podría repensarse el planteamiento de esta gratuidad, que comprende tanto la comida, como el servicio de monitores y el transporte escolar.
Como las horas de comedor no son lectivas, la Administración no sufraga su coste --salvo con becas para casos de necesidad--, y son las familias a través de las asociaciones de padres y madres (ampas) quienes contratan empresas para ofrecer este servicio.
Esto no sucede con los alumnos que estudian en municipios diferentes al de su residencia, ya que no pueden comer en casa, según la legislación actual.
REVALORIZAR LA HORA DE COMER
La presentación de este informe quiere revalorizar la importancia que las escuelas dan a las dos horas y media de comedor, y que "no son solamente para ingerir alimentos", sino una buena oportunidad para educar de forma más lúdica.
En este sentido, la fundación ofrece talleres a las escuelas para que los alumnos aprendan hábitos y valores relacionados con la alimentación.