BARCELONA 22 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Urbana y los servicios municipales de Higiene Pública y Zoonosis clausuraron ayer una perrera ilegal situada en la Carretera Alta de Roquetes, donde cazadores dejaban los perros que utilizaban para cazar en jaulas sin las condiciones mínimas de salubridad para los animales, según informó hoy el citado cuerpo en un comunicado.
Con la clausura, que se produjo sobre las 9.30 horas de ayer, la policía identificó a los propietarios de los animales y abrió un expediente. Los agentes encontraron unos 15 perros con las mismas condiciones que días antes en una inspección, por lo que precintaron las instalaciones.
Tras la inspección ya avisó a los responsables de que los animales se tenían que trasladar en un lugar con mejores condiciones, les informaron de que las ordenanzas prohíben confinar un número de animales "tan elevado" en un mismo sitio, y que esta actividad requiere de permisos para supervisar y asegurar unas condiciones apropiadas.
Los equipos de Zoonosis municipales valoraron que no era necesario trasladar ningún animal a la perrera municipal denominada Centre Municipal d'Acollida d'Animals de Companyia (CAAC), situada en la Carretera de l'Arrabassada, porque sus propietarios se encargaron de ellos.