BARCELONA, 9 Dic. (EUROPA PRESS) -
Un centenar de trabajadores del sector del juego se han concentrado la mañana de este miércoles en la plaza Sant Jaume de Barcelona para pedir a la Generalitat la reapertura de bingos y casinos, cuyo cierre aseguran que afecta a 8.000 familias directas y 29.000 indirectas.
"Queremos trabajar", han exigido los trabajadores a las puertas del Palau de la Generalitat, ya que sus centros de trabajo solo estuvieron abiertos --parcialmente y con restricciones-- del 8 de julio al 15 de octubre y cuya reapertura no está prevista en ninguna de las cuatro fases del plan de desescalada.
El portavoz del colectivo catalán de trabajadores del juego Víctor Manuel Duce ha afirmado en declaraciones a los medios que las medidas de seguridad e higiene y el control de aforo se cumplen "a raja tabla" en los centros de juego y ha pedido reiteradamente equiparación respecto a otros sectores.
"Queremos ser como nuestros compañeros --restaurantes, peluquerías, gimnasios, teatros-- que ahora mismo están operando, y a nosotros se nos ha dejado al margen", ha reivindicado Duce, que también ha pedido que no se les considere como ocio nocturno.
El presidente del Casino de Barcelona, Luis Horta, ha declarado: "Es una discriminación total y sin sentido, y no entendemos: queremos que nos den una explicación de por qué no podemos estar dentro de ninguna de las cuatro fases cuando tenemos garantizadas la seguridad y la limpieza".
"No ha habido ningún contagio que sepamos dentro de nuestras instalaciones por parte de ningún cliente, por tanto somos seguros, igual que cualquier otro de los negocios que ahora están funcionando, y puede que más", ha explicado la trabajadora Helena Fernández.
Los trabajadores llevaban pancartas con mensajes reclamando poder reabrir los establecimientos, con frases como: 'Por tanta paciencia se nos acabó la solvencia'.